Unos 70 agentes de Policía Local de toda la provincia se manifestaron ayer por las calles de Almodóvar con el fin de reivindicar mejoras laborales para los ocho agentes almodovenses que llevan dos meses de baja, así como para protestar por la "represión brutal" a la que están siendo sometidos por parte del concejal de Seguridad, Juan Moro, y la alcaldesa, Sierra Luque.

La manifestación, durante la que no se produjo ningún incidente, culminó en la puerta del Ayuntamiento, donde los policías pidieron al Equipo de Gobierno una negociación colectiva y aseguraron que "no vamos a consentir que se nos coaccione".

Según un comunicado que repartió el Sindicato Independiente de Policías Locales y Bomberos de Córdoba (Siplb), el desencadenante de esta nueva protesta policial ha sido la actitud del Equipo de Gobierno, que en vez de buscar una solución al problema, ha continuado con las represalias y amenazas. De hecho, los ocho agentes de la plantilla de la Policía de Almodóvar han presentado una denuncia contra la alcaldesa por amenazar con llevarse "a cuatro policías por delante" antes de irse y por quitarles de la nómina el complemento de productividad y el de diferencia de jornada laboral.

Por su parte, Juan Moro informó ayer de que el Ayuntamiento va a ir a la inspección de trabajo para que se investigue si los ocho agentes realmente están de baja médica o "es una huelga encubierta". En este sentido, Moro indicó que si están de baja, "es un médico quien tiene que resolver su problema" y, si es una huelga, "que lo digan abiertamente y nombren a sus representantes, que nosotros estamos dispuestos a negociar".