El concejal de Urbanismo de Pozoblanco, Francisco López, ha confirmado que el Ayuntamiento tiene intenciones de derribar la antigua caseta del tren, situada a la salida de Pozoblanco en dirección a Pedroche. El edil ha señalado que en esa zona va una rotonda, que se construirá cuando culmine todo el proceso de cambios urbanísticos que está experimentado el lugar. López ha añadido que es posible que se construyan réplicas de la caseta y los antiguos tubos que utilizaban los pozoalbenses para obtener agua, con el fin de colocarlas en alguna zona lúdica.
El anuncio del concejal es un jarro de agua fría para el grupo de ciudadanos que hace unas semanas colocaron una pancarta en esta caseta, en la que se puede leer SOS que me tiran . Con ella pretenden llamar la atención de las autoridades locales para que conserven esta vieja edificación, uno de los pocos vestigios en pie del pasado local. Estos mismos ciudadanos piden también que se construya una rotonda en esa zona y que junto a la vieja caseta se coloquen bancos para sentarse, además de un pequeño parque infantil.
La petición de este nutrido grupo de pozoalbenses se une a la que hace un tiempo realizó la asociación para la conservación del patrimonio local Piedra y Cal, en la que se pedía que no se derribase y se restaurara. La entidad quiere que se mantenga el inmueble no por su valor arquitectónico, que como reconocen no tiene, sino por su significado histórico, referencia del paso del ferrocarril en el pasado. Para estas personas, como ha sucedido con otros inmuebles, puede que el arrepentimiento por no haberla conservado llegue tarde.
