Aguilar volvió a convertirse anoche en la capital cultural del vino. Más de 2.300 personas participaron en una cata dirigida de vinos de la zona en el tradicional y emblemático recinto de la Plaza de San José. Todas las entradas puestas a la venta se agotaron varios días antes, no pudiendo atenderse las muchísimas demandas de última hora.

El alcalde de la localidad, Francisco Paniagua, abrió el acto dando la bienvenida a los presentes y poniendo de relieve "la necesidad de unir esfuerzos para poder superar la crisis que atraviesa el sector vitivinícola". También habló de la I Feria de Muestras que se celebrará en septiembre y de la solicitud del Ayuntamiento para que esta zona cuente con un parque tecnoagroalimentario. Por último, tuvo un especial reconocimiento para Antonio Sánchez, "una persona que tanto ha trabajado por el vino y la cultura y que, afortunadamente, ha superado con éxito el amargo trance de los últimos meses".

El periodista y presentador de los informativos de Canal Sur Televisión, Juan Carlos Roldán, fue este año el encargado de pronunciar el pregón. Comenzó hablando de los primeros vestigios del vino y de su relación con el hombre y con los santos. En concreto citó a San Martín de Tours, que podría haber sido canonizado por su descubrimiento de la poda (su burro se comió un viñedo y ello provocó un fuerte incremento en la producción de la siguiente cosecha). Destacó, también, la difícil labor de los catadores y la calidad de los vinos de la zona, especialmente del PX.

Posteriormente, el enólogo Santiago Alonso Bosch dirigió la cata de 5 vinos: tinto, fino, amontillado, moscatel y PX. Tras una breve exposición de sus características visuales, olfativas, gustativas y táctiles, propuso al público una sugerente experiencia: asociar las sensaciones provocadas por cada uno de ellos a los palos del flamenco que un guitarrista fue interpretando. Además, invitó a asociarlos con otras sensaciones artísticas.

Las divertidas parodias de los Morancos pusieron el broche final a esta grata velada en la que el diálogo y la amistad se fundieron con el disfrute de los caldos de excepcional calidad que esta tierra produce.