Más de tres horas de reunión necesitaron los representantes sindicales del personal funcionario, el concejal encargado de las negociaciones, Benito García, y el alcalde de Pozoblanco, Antonio Fernández, para llegar a un acuerdo consensuado en el que ambas partes tuvieron que ceder en distintos apartados de los elementos a negociar para desbloquear el contencioso que venían manteniendo el equipo de gobierno y los efectivos de la Policía Local.

El concejal de Policía Local, Benito García, fue el encargado de presentar ayer en rueda de prensa el acuerdo, desglosado en varios apartados. Sin embargo, uno de los puntos quedó abierto a la espera de recibir un informe de la Consejería de Gobernación donde se haga una interpretación de la Ley de Coordinación de Policías Locales de Andalucía en la que se establece la reclasificación profesional de los efectivos como grupo C. A falta del informe, los representantes de ambas partes acordaron que si la reclasificación no significaba un incremento salarial, los sindicatos regionales no promoverían nuevas negociaciones al objeto de modificar la ley vigente. En el caso de que el aumento en el salario sea vinculante, se llevará a cabo un estudio que determine la posibilidad de tal aumento y la temporalidad en el que se hará efectivo. Las discrepancias en este apartado han llevado al equipo de gobierno y los representantes de la Policía Local a aceptar la intervención de un tercero, en este caso, el órgano de mediación y consulta erigido por las órganos creadores de dicha ley.

PUNTOS CERRADOS Los acuerdos que sí quedaron cerrados fueron el ofrecimiento del Ayuntamiento a crear dos nuevas plazas de policías locales para el ejercicio del 2004, que se completará con una reorganización y cambio en la metodología del colectivo, además de las compensaciones por sustitución, las vacaciones de los efectivos y el paso a la segunda actividad.

En cuanto a las negociaciones con el resto de personal funcionario, el concejal Benito García informó que se retomarán en dos semanas.