La Corporación municipal de Palma del Río ha aprobado por unanimidad la expropiación relativa al proyecto de defensa, restauración ambiental y adecuación para uso público de las márgenes del río Genil. Tras las expropiaciones, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) acometerá el plan que evitará inundaciones y creará nuevas zonas verdes de esparcimiento.
El concejal de Urbanismo, José Gamero, señaló que se trata de 13 afectados, terrenos en su mayoría dedicados a la citricultura, nueve desde el puente de la Alegría hasta la calle Miralrío, y cuatro en la zona de la calle Río Seco.
GENEROSIDAD
El alcalde, Salvador Blanco, ha informado de que tras mantener reuniones con los propietarios cree que en el 90% de los casos se alcanzarán acuerdos pactados porque "estamos siendo generosos". Blanco puntualizó que son propiedades pequeñas, matizando que la mayor tendrá una superficie de 4.500 metros cuadrados. El primer edil defiende las expropiaciones pactadas por la necesidad de efectos fiscales e insiste en que "se están negociando precios muy razonables".
El proyecto está financiado por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir a través de fondos europeos en un 75% y el Ayuntamiento aporta el 25% restante. Las obras se han adjudicado a la empresa Corsán-Corviám y ascienden a 1.588.653,72 euros.
El plan se va a desarrollar en cuatro actuaciones. La primera está comprendida entre el puente de la Alegría y la zona conocida como La Chirritana, donde se instalarán diques de defensa para evitar las inundaciones, integrando especies de vegetación autóctona de la zona. Otro de los puntos a proteger de inundaciones se encuentra en la calle Río Seco, bajo la parroquia de la Asunción y junto al recinto histórico. También se van a proteger los meandros que forma el río en el paraje de Duque y Flores y a la altura del arroyo La Baera. El proyecto de encauzamiento dotará a la ciudad de zonas verdes y espacios para uso lúdico y recreativo.
La asociación para la defensa del patrimonio Saxoférreo presentó a la CHG una serie de consideraciones para conservar el patrimonio hidráulico que han sido recogidas. En este sentido, se va a respetar la morfología de los tres azudes y la pasarela se ubicará sobre el antiguo puente de madera.
