La merienda de los inventores

Como un éxito de organización, participación y asistencia se puede clasificar la celebración de la II Merienda del Inventor, un encuentro de jóvenes escolares, de 3º de primaria a 2º de ESO, de los poblados de colonización de Hornachuelos (Bembézar, Céspedes, Mesas de Guadalora y La Parrilla), donde demuestran su imaginación, presentando distintos inventos realizados por ellos mismos o con la ayuda de sus padres, que este año estaba centrado en torno al Universo. Trabajando con materiales sencillos, como madera, corcho o cartón, se han presentado veinte proyectos de los que han recibido el primer premio los hermanos Vanesa y Miguel Angel Galisteo, de La Parrilla, y Francisco Javier Carrizosa Martínez, de Céspedes.

Este encuentro se ha llevado a cabo en el cine San Isidro de Mesas de Guadalora donde se han reunido más de doscientas personas. Ha servido de marco para llevar a cabo la clausura de una serie de actividades organizadas por la Zona de Trabajo Social de Hornachuelos del Patronato Provincial de Servicios Sociales. El acto de clausura estuvo presidido por el concejal de Educación, Angel Fernández, las responsables del equipo de la Zona de Trabajo Social de Hornachuelos y el alcalde pedáneo de Mesas de Guadalora. Entre las iniciativas que han finalizado se encuentran los talleres de fabricación de juguetes que funcionan en Mesas de Guadalora y en La Parrilla; el taller de pintura sobre tela en Bembézar y taller de teatro en Céspedes.

PEQUEÑOS Y MAYORES

Estas actividades se han venido realizando dentro del programa Aldeas y Diseminados 2002. Estos talleres han movilizado a más de sesenta personas, niños y jóvenes en los talleres de teatro y juguetes, y mayores en el de pintura de telas.

Durante la merienda se han expuesto las obras realizadas en los talleres, ofreciendo los alumnos de teatro la representación de la obra El Rey Filipondio . También han colaborado en las actividades de este día el grupo de baile Golosinas , de Mesas de Guadalora; el taller de desarrollo personal de discapacitados Remolinos, de Hornachuelos, y los alumnos del colegio público rural Bembézar, de Céspedes. Tras la exposición y las actuaciones se sirvió un chocolate con churros a todos los asistentes.