Cleto Infante, la capacidad de ser feliz

Cleto Infante Nieto falleció el pasado domingo después de una vida larga, intensa, plena. Cleto se ha marchado con 98 años, casi centenario, y deja un indeleble recuerdo entre quienes lo conocimos y tuvimos la suerte de disfrutar de su sabiduría, de su educación, de su saber estar. En un mundo apresurado y superficial como el que se impone, la marcha de referentes vitales como Cleto Infante supone una pérdida de capital humano insustituible por todo lo que atesoran.

Cleto Infante se licenció en Medicina en Madrid y adquirió la especialización en la que desarrolló su vida profesional en el Instituto Oftalmológico Nacional. Su ejercicio de la oftalmología fue intenso y extenso y durante más de 50 años mantuvo consulta y atención en Ronda de los Tejares y en distintos centros sanitarios privados y públicos, donde se le conocía por su cercanía y por su solidaridad con aquellos que más lo necesitaban.

Muy conocido y respetado en Córdoba y en su Villaviciosa natal, Cleto consiguió el reto de compartir vivencias con los suyos hasta horas antes de su fallecimiento. De vida ordenada, costumbres fijas y hábitos metódicos, Cleto bajaba todos los días desde su piso ubicado en Ronda de los Tejares al bar del Colegio de Arquitectos, a los Lobos y a otros del entorno a disfrutar de la conversación con quienes en algún caso podrían ser sus nietos o incluso bisnietos. Amigo de sus amigos, su carácter afable y sus inteligentes exposiciones convertían cada encuentro con él en un acontecimiento.  

Monterías en Villaviciosa

Hasta la temporada pasaba, Cleto fue emblemático asistente a muchas de las monterías que se organizan en la bendita sierra de Villaviciosa. Con su sobrio y asolerado atuendo, aguantaba las horas en el puesto y las durezas del monte con un vigor y un tesón impropio en una persona casi centenaria. Su sencillez y su fina elegancia serrana se imponían en aquellos soberbios parajes.

Padre de tres hijos; José, Clara y Beatriz y abuelo de cinco nietos; Eduardo, Alberto, Antonio, Pablo y Álvaro, Cleto compartió su vida con Concepción de la Torre durante más de 60 años años, hasta que su esposa falleció en 2022.

La figura de Cleto Infante forma parte ya de nuestra memoria y ahí perdurará porque nunca se olvida a quien ha significado tanto, a quien tenía la enorme capacidad para ser feliz con los aspectos más sencillos de la vida.