La cultura asiática en Córdoba, de novedad a consolidación

Palabras como anime, kawaii, o ramen eran, hasta hace no mucho, completamente desconocidas para muchos cordobeses. Sin embargo, la cultura asiática —especialmente japonesa— ha ganando terreno en la ciudad en los últimos años. Los restaurantes de gastronomía japoneses, lejos de ser una novedad, se han convertido en parte del paisaje culinario local, con propuestas cada vez más innovadoras. Los mangas ocupan un espacio creciente en las librerías y las figuras y juegos relacionados con esta cultura se han vuelto algo transversal.

Uno de los ejemplos más claros de esta evolución es Sebastián Yu, un joven de origen chino de 28 años que abrió su tienda de bubble tea a principios de 2024. El éxito fue tan rotundo que recientemente trasladó su negocio a un local más grande en la calle Claudio Marcelo.

El bubble tea, bebida china elaborada con té, leche y perlas de tapioca, ha conquistado a los cordobeses gracias a las múltiples versiones y sabores que ofrece al cliente. Yu, que llegó a España hace cuatro años para cursar un máster en Córdoba y otro en Granada, descubrió en esta última ciudad la presencia de varios locales de bubble tea y matcha tea, algo que en Córdoba aún no existía. Decidió entonces emprender, perfeccionó su receta y hoy se muestra «muy contento» con la acogida. La mayoría de su clientela es joven, aunque invita a personas de todas las edades a probar esta refrescante bebida.

Los dulces japoneses también han aterrizado en la ciudad. Yang Deng, quien llegó a Córdoba hace seis años, echaba de menos los sabores de su país. Comenzó preparándolos en casa, pero hace tres meses dio el salto y abrió Puchu Puchu. «Los dulces españoles están demasiado azucarados», comenta. En su tienda ofrece el clásico suflé japonés, una especie de tarta grande y esponjosa que sorprende tanto por su aspecto como por su sabor. Yang la elabora al momento, con nata y distintos toppings para adaptarla al paladar cordobés. Además, en su establecimiento se puede encontrar helado chino, elaborado principalmente con hielo y leche de coco.

La comida asiática evoluciona

La gastronomía asiática más clásica también ha experimentado una notable evolución, sobre todo en lo referente al tipo de oferta que buscan los clientes. Un claro ejemplo es L. San Sushi Ramen, un buffet que abrió hace dos años en el centro. José Luis Ortiz, uno de sus responsables, asegura que su negocio destaca porque la comida se prepara al momento, un concepto «innovador en Córdoba».

Nuevas bebidas

Ortiz, con experiencia en otros negocios similares, asegura que el paladar de los cordobeses ha cambiado: «Ahora el cliente sabe lo que quiere y lo que busca». Según él, la comida japonesa ha trascendido generaciones y se ha convertido en parte del día a día en la ciudad, «tan popular como el rabo de toro», bromea. Esta tendencia ha llevado a incorporar a la oferta platos más allá del sushi, como el ramen, los mochis y el pan bao, entre otros platos.

Otro de los formatos que ha ganado popularidad es el de las barbacoas asiáticas. En Yakimanzi, abierto en enero, cada mesa tiene una plancha donde los clientes pueden cocinar su carne al gusto. Rocío Zhen, su propietaria, explica que la idea surgió al notar la ausencia de este concepto en Córdoba. Su restaurante se inspira en la tradición de las barbacoas coreanas y ofrece una forma diferente de disfrutar la comida, aunque adaptándose a los gustos locales.

Manga y juegos de cartas

La influencia de la cultura asiática en Córdoba no se limita a la gastronomía. El manga es otro de los productos más demandados en la ciudad. José Miranda, responsable de Crash Comics, señala que este género tiene un peso creciente en su tienda, aunque destaca que «sigue habiendo mercado para el cómic». Según él, los lectores de manga han aumentado considerablemente en los últimos años, especialmente entre los jóvenes y con una mayoría de mujeres.

Tras más de dos décadas en la tienda, Miranda ha notado que, cuando sus clientes rondan los 30 años, muchos cambian sus preferencias hacia el cómic europeo o estadounidense. Los gustos dentro del manga también han evolucionado: más allá de clásicos como Dragon Ball, ahora los géneros románticos (shojo) están en auge y los lectores exploran diferentes temáticas con mayor diversidad.

Fernando Portal, de la tienda de juegos Estalia, también ha percibido el crecimiento del interés por la cultura japonesa. «Quienes juegan a Pokémon, Yu-Gi-Oh! o leen manga ya no son considerados frikis. Es algo que ha calado en toda la sociedad», afirma. En su tienda, las cartas de Pokémon han experimentado un boom entre niños y adultos, sirviendo como puerta de entrada a otros productos. Además, Portal destaca la comunidad que se ha formado en torno a estos juegos. Cada fin de semana, su tienda se llena de jugadores que participan en competiciones de Warhammer o Yu-Gi-Oh!. Finalmente, menciona el éxito de los Funko Pop, figuras coleccionables de origen coreano que han generado todo un fenómeno de consumo.

Todos ellos coinciden en que la cultura asiática ha dejado de ser una tendencia pasajera en Córdoba para convertirse en una parte cada vez más integrada en la vida cotidiana. Desde la gastronomía hasta el entretenimiento, su impacto sigue creciendo y evolucionando, adaptándose al gusto de los cordobeses y generando nuevas oportunidades de negocio y comunidad.

Suscríbete para seguir leyendo