Salud

CSIF denuncia que el SAS ha ordenado el cese de la vacunación a mutualistas en Córdoba por la crisis de Muface

El sindicato exige resolver esta situación, que afecta a más de 322.000 personas en Andalucía, fundamentalmente menores de edad incluidos en el calendario vacunal

Vacunación en un centro de salud de Córdoba.

Vacunación en un centro de salud de Córdoba. / CÓRDOBA

Diario CÓRDOBA

Diario CÓRDOBA

CSIF, sindicato más representativo en las administraciones públicas, denuncia que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha ordenado el cese de la vacunación a mutualistas en los centros de salud de toda la comunidad autónoma tal y como se venía realizando hasta el momento, en plena crisis por la falta de acuerdo entre Gobierno y aseguradoras para el concierto sanitario de Muface. Córdoba es una de las provincias donde se han detectado estos casos, junto con Jaén y Málaga.

Esta situación afecta a más de 322.000 personas acogidas a Muface, Mugeju e Isfas (mutualidades de funcionarios civiles, de la Justicia y de las Fuerzas Armadas), salvo a las personas que residen en pequeñas poblaciones rurales, tal y como consta en una nota de la Consejería de Salud y Consumo. CSIF ha denunciado esta cuestión a Muface para que se dé una solución a esta medida discriminatoria, que afecta fundamentalmente a menores de edad incluidos en el calendario vacunal.

Réplica de la Junta

Este extremo ha sido rotundamente contestado por la Junta: "El SAS no ha cesado la vacunación a mutualistas en los centros sanitarios públicos porque nunca ha estado contemplada más allá de la establecida en un acuerdo para garantizarla en las zonas rurales". Así lo han aclarado fuentes de la Consejería de Salud y Consumo a preguntas de Europa Press.

El SAS ha recordado que la normativa (resolución de 22 de diciembre de 2021, de la Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado, por la que se publica el concierto suscrito con entidades de seguro para el aseguramiento del acceso a la asistencia sanitaria en territorio nacional a los beneficiarios de la misma durante los años 2022, 2023 y 2024, que actualmente se está negociando) recoge que será Muface quien realizará las actuaciones establecidas por la normativa sanitaria en materia de prevención y promoción de la salud que incluyen vacunaciones en todos los grupos de edad y, en su caso, grupos de riesgo, según el calendario común de vacunación del SNS, en los términos establecidos por las administraciones sanitarias competentes, así como cualquier otro programa, calendario o campaña de vacunación que determinen las autoridades sanitarias.

Igualmente, la norma dice que la entidad dispondrá de los medios necesarios para llevar a efecto los programas preventivos incluidos en la cartera de servicios, garantizando la información adecuada a los beneficiarios, así como el calendario, direcciones y horarios de los centros donde se llevarán a cabo las vacunaciones y los programas de prevención.

Argumentos de CSIF

Esta incidencia, añade CSIF, se suma a las continuas quejas por denegación de pruebas, citas e intervenciones quirúrgicas que está recibiendo CSIF en toda España, ante la falta de un acuerdo definitivo entre Gobierno y aseguradoras para el nuevo concierto sanitario de Muface. Por este motivo, nuestra organización mantiene la jornada de huelga para el próximo 13 de febrero, a la que están convocados más de medio millón de funcionarios de toda España en diferentes ámbitos: personal docente, centros de la Administración General del Estado y el personal funcionario de Correos.

Hasta el momento, el Sistema Andaluz de Salud era el encargado de administrar las diferentes vacunas a mutualistas y beneficiarios y de expedirles un certificado que estos posteriormente debían entregar a las aseguradoras para que abonasen al organismo andaluz el importe económico derivado del procedimiento. Esta decisión afecta a todas las vacunas del calendario vacunal: nirsevimab, VPH, herpes zoster, neumococo, meningococo, hepatitis A_B para grupos de riesgo, entre otras y por tanto, a la población más vulnerable. El SAS emplaza ahora a los mutualistas a acudir a su centro concertado a que les expida una receta para, posteriormente, adquirir en farmacia adelantando el coste de su bolsillo la dosis correspondiente para su inyección. 

Además del perjuicio económico y la discriminación, la negativa del SAS a aplicar la vacunación a mutualistas puede conllevar la disminución de las coberturas de vacunación, lo que reduce la protección indirecta de la población no vacunada o que no ha generado protección por su edad o por problemas de salud, así como retrasos en la vacunación, lo que puede generar importantes problemas de salud en determinados grupos etarios como los menores de 15 meses o personas inmunodeprimidas y un aumento de la incidencia de enfermedades inmunoprevenibles como la gripe o la aparición de brotes o reemergencia de determinadas enfermedades infecciosas.

Por todo ello, desde CSIF exigen que se reanude la vacunación de los mutualistas de opción concertada en los centros sanitarios andaluces, como se venía realizando hasta el pasado 15 de enero.

Tracking Pixel Contents