Religión
Culmina un proceso de doce años para conseguir la santificación del obispo Osio de Córdoba
El Cabildo Catedral de Córdoba espera que la canonización se pueda hacer efectiva el próximo mes de mayo

Demetrio Fernández, Jesús Daniel Alonso Porras, Antonio Reyes y Alfonso Ramírez Peralbo. / CÓRDOBA
La santificación del obispo Osio de Córdoba está cada vez más cerca. El papa Francisco ha firmado un promemoria para impulsar la santificación tras un proceso que no ha sido corto ni fácil y en el que se ha tenido que demostrar, con mucha documentación, el culto a Osio en Oriente a la vez que desmontar el relato de las acusaciones contra él que existían en Occidente, donde lo calificaban de hereje. Han sido 12 años de trabajo hasta llegar hasta aquí y el Cabildo Catedral de Córdoba espera que la santificación se pueda hacer efectiva el próximo mes de mayo, coincidiendo con la visita del papa Francisco y el patriarca Bartolomé I a Turquía para el aniversario del Concilio de Nicea.
No será una santificación con una gran celebración en Roma. La del obispo Osio será una canonización equivalente, como la de San Ireneo o la de San Juan de Ávila, ordenada por el papa y que no pasa por el proceso formal de canonización porque su veneración viene de muchos años atrás. El obispo de Osio será santo por extensión del culto que tiene en Oriente y que ahora "se extiende a la iglesia universal", ha explicado el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, junto a Jesús Daniel Alonso Porras, vicario general de la diócesis; Antonio Javier Reyes Guerrero, canónigo de la Catedral y comisario del Congreso El siglo de Osio de Córdoba, celebrado del 28 al 31 de octubre de 2013 y que sirvió de documentación a la causa, y fray Alfonso Ramírez Peralbo, postulador de la causa del obispo Osio de Córdoba.
En el proceso para la santificación no solo son necesarias las declaraciones de los testigos, sino todo documento que avale o esté a favor de ese hecho, tanto en el mundo civil como religioso y si hay material contrario hay que clarificarlo, han explicado este miércoles. Para la iglesia de Córdoba, empujar esta causa es importante por una cuestión de justicia para reconocer su santidad "ensombrecida por una leyenda negra".
Así fue el proceso
Fue en el año 2012 cuando al actual obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, se le ocurrió investigar qué se podía hacer para conseguir la santificación de Osio. En el año 2013 se dieron ya los primeros pasos con el congreso internacional El siglo de Osio de Córdoba, del que salió un voto especial sobre la santidad de Osio por parte de historiadores como Antonio Reyes, Juan José Ayán, Manuel Nieto Cumplido o Vittorino Grossi. Fue uno de los documentos usados para engrosar la petición de la canonización a Roma, así como un importante discurso que el papa Pío XI dedicó a Osio o la estatua que tiene en su nombre en la plaza Capuchinas de Córdoba, como parte de la documentación civil.
Pero no se conseguía avanzar en el proceso ni el visto bueno. El postulador de la causa cuenta que se tardaba mucho la respuesta de la Secretaría de Estado, que finalmente respondió pidiendo que "de esta causa no se hable más, que se dé por perdida y por muerta". Aun así, todavía existía un rayito de luz y la Congregación de los Santos pidió clarificar lo que fuera necesario para retomar la santificación.
Pasó un tiempo hasta volver al proceso, en el que se incluyó también en la documentación los datos de una peregrinación con 2.000 cordobeses hasta Roma de hace 100 años y otros documentos civiles, como una medalla conmemorativa de bronce dedicada a Osio por la Fábrica de Moneda y Timbre, así como unos sellos conmemorativos y un estudio elaborado por un profesor del Instituto Oriental sobre la liturgia de Osio y la antigüedad de su culto. Se prepararon los documentos, se mandaron a la Congregación, la Secretaría de Estado dio el visto bueno esta vez, pero vino la pandemia y algunos cambios dentro de la iglesia, que ralentizaron el trabajo. Si no fuera por eso, "Osio estaría canonizado hace años", dice fray Alfonso Ramírez Peralbo.
Fue al presentarle una promemoria con todos los puntos al papa, de manera que la causa no pudiera volver atrás, cuando quedaron anuladas todas las teorías contrarias a Osio y se pudo llegar al día de hoy. Ha sido el papa Francisco el que ha estado al frente del Vaticano durante todo el proceso y quien ahora da el visto bueno a esa promemoria para avanzar en su santificación. Si bien no habrá celebración en Roma, sí la habrá en Córdoba, ha dicho Demetrio Fernández, que deja abierta la posibilidad de cambiar el día de celebración del santo, en pleno agosto, por un mes menos complicado en la provincia.
Amigo del emperador Constantino, perseguido y torturado por no renegar de su fe, protagonista del Concilio de Nicea, defensor de la verdad frente a la herejía de Arrio y autor de una buena parte del Credo que profesamos cada domingo en Misa, Osio de Córdoba ya va camino de los altares. Aunque no tienen fecha, el obispo espera que el proceso concluya en el mes de mayo.
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