La FAMP elabora una guía práctica para que los ayuntamientos creen o actualicen la nueva tasa de basura

La Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) ha elaborado una guía práctica para ayudar a los ayuntamientos de la comunidad que tengan pendiente aprobar o actualizar la prestación patrimonial para la recogida de residuos antes del 10 de abril de 2025. El presidente de la FAMP y alcalde de Córdoba, José María Bellido, ha dado a conocer dicha guía que responde a la obligación establecida por la Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular que establece, por orden de la Unión Europea, la obligación por parte de las administraciones locales de repercutir el coste de la recogida de basura a sus ciudadanos. Esta obligación está provocando importantes subidas de la tasa de basura en toda España. En Córdoba, sin ir más lejos, dicha adaptación de la normativa europea --y otras circunstancias como la implantación del quinto contenedor-- ha tenido una traducción de un incremento del 35% y del 10% de la tasa de basura en los años 2024 y 2025.

La guía de la FAMP ha sido confeccionada por el departamento de Derecho Administrativo de la Universidad de Sevilla, liderado por el catedrático de Derecho Administrativo, Juan Antonio Carrillo, que ha explicado este lunes en Córdoba las claves de este instrumento de consulta que está a disposición de los ayuntamientos en la web de la FAMP.

Además de esta acción de índole práctica, la FAMP ha aprobado por unanimidad de todos los grupos políticos una proposición para pedir al Gobierno de España que el dinero de esa tasa revierta en los ayuntamientos. Por otro lado, en la FEMP, se ha dado un paso más para pedir que se le dé una vuelta a esta ley y se haga un estudio pormenorizado de los costes que acarrea. "Parto de esa premisa: desde el municipalismo no estamos de acuerdo con la imposición de esa tasa", ha afirmado Bellido para recordar que nadie quiere asumir el desgaste político que está conllevando la subida en todos los municipios sean del color que sean.

Un cambio de modelo

Carrillo ha explicado que la ley supone un cambio radical en el modelo de gestión de los residuos, donde entra en juego el concepto de economía circular porque el espíritu que alienta la norma es reducir al máximo los enseres que acaban en el vertedero. Además, la idea que se persigue es hacer pagar a quien más contamina por lo que la tasa debe ser un instrumento financiero obligatorio, de cobro diferenciado y específico. Asimismo, ese cambia de paradigma en la gestión de residuos debe traducirse de cara a 2025 con una reducción del 13% en el peso de los residuos generados por cada municipio.