SOLIDARIDAD

'¿Nos ayudas a abrir puertas?' Un proyecto para rehabilitar los barrios más desfavorecidos de Córdoba

Esta iniciativa busca sacar a los jóvenes de la cadena de pobreza mediante actividades lúdicas

El cura Miguel David Pozo, cabeza visible del proyecto Puerta Verde centrado en niños, adolescentes y jóvenes en desventaja social en los barrios Guadalquivir y Sector Sur

El cura Miguel David Pozo, cabeza visible del proyecto Puerta Verde centrado en niños, adolescentes y jóvenes en desventaja social en los barrios Guadalquivir y Sector Sur / MANUEL MURILLO

Córdoba cuenta con algunos de los barrios más pobres de España. En el séptimo lugar está el barrio del Guadalquivir y en el 13 se encuentra el Sector Sur, los dos barrios en que se centra el proyecto Puerta Verde. Con Miguel David Pozo, párroco de las iglesias de Santa Luisa de Marillac y San Martín de Porres, como cabeza visible, esta iniciativa busca ayudar a gente, aparentemente, sin futuro.

Para visibilizar el proyecto, Pozo presentará el próximo martes 13 a las 20.00 horas, en el Mercado Victoria, una campaña para promocionar el proyecto Puerta Verde llamado ¿Nos ayudas a abrir puertas?.

"Existe una cadena de pobreza. Lo más probable cuando creces en la pobreza es perpetuarla y que tus hijos también sean pobres", comenta el párroco. Para lograr escapar de esta espiral de pobreza, Pozo tiene una solución: el amor. "Ante una caricia, los niños primero te rechazan, es lo normal, mayoritariamente son gente tan herida que están a la defensiva. Después, con el tiempo, ellos buscan el abrazo, son chicos que hace mucho que no reciben amor, viven en circunstancias difíciles de violencia, padres encarcelados...", explica Pozo.

La iniciativa Puerta Verde

Puerta Verde pretende rehabilitar estos barrios marginales por medio de los niños y los adolescentes. El cura explica sus armas: "Usamos la creatividad. Nuestro objetivo es, a través de lo lúdico, crear hábitos saludables en los chicos, cosas como juegos o música. Es muy importante la belleza, son barrios con espacios feos y sucios, necesitamos usar la belleza empleada en palabras y actos".

El cura Miguel David, responsable del proyecto Puerta Verde.

El cura Miguel David Pozo, responsable del proyecto Puerta Verde. / MANUEL MURILLO

Los voluntarios necesitan pasar un proceso de adaptación, explica Pozo. "Es normal que les cueste confiar en gente que no es del barrio, son recelosos porque mucha gente ha venido creyéndose salvadores. Estos barrios no son un zoológico o un parque temático de la pobreza. Son personas igual que tú o igual que yo, que viven en una situación de pobreza, pero no porque tengan esta condición son distintos, nuestra forma de acercarnos tiene que ser de igual a igual", explica el párroco.

El verano en estos barrios

"Los niños rompían las bocas de riego para poder refrescarse"

"En verano estos niños no tienen nada, pierden las comidas del comedor escolar, no hay extraescolares", afirma el cura. Y el problema no es solo el hambre. Sin nada que hacer, los niños pasan demasiadas horas solos en la calle y empiezan a coquetear con la delincuencia. "En verano un pobre no tiene ni piscina. Cuando llegué, recuerdo que los niños rompían las bocas de riego para poder refrescarse, y obviamente venía la Policía".

Es por esto que en verano acuden voluntarios de todas partes de España. "La parroquia tiene un patio interior y alrededor de este hay aulas. En verano las transformamos en habitaciones para que jóvenes de toda España vengan a vivir al barrio, conozcan la realidad de este y ayuden a la gente", cuenta el párroco.

Imagen de archivo del Poligono guadalquivir.

Imagen de archivo del Barrio del Guadalquivir. / AJ GONZALEZ

¿Cómo ser un héroe?

"Ser héroe está chulísimo. Uno es un héroe cuando en su propósito está el otro, cuando te das a los demás. Yo soy profesor de instituto, ¿sabes lo que me mosquea más de estos nenes? Que no piensan nada más que en ellos, eso no es bueno. Todos somos solidarios a nivel teórico, pero yo le digo a los niños: dame tu agenda, ¿qué haces por el otro? Y la realidad es que no hacen nada", afirma el párroco, que añade que "se deberían escribir en mayúscula palabras como amor, donación y una que aparentemente suena mal: sacrificio. Creo que el sacrificio es una palabra que no entendemos, porque uno se sacrifica por lo que ama, y creo que debemos de amar más al otro".

"Cuando en la suma sale el otro, significa que la cuenta está bien hecha"

Pero, ¿qué ocurre cuando es demasiado tarde? "Existen estos casos, niños que conoces desde los 7 años y llegan a los 11 años y ves que, ojalá me equivoque, van a ser delincuentes. A su corta edad han abandonado la escuela, no quieren ayuda de nadie, han perdido la infancia, ya no les brillan los ojos", explica el cura, que añade que "puedes proponer caminos, abrir puertas y tratar de acompañar a las personas, pero no puedes imponer la salvación".

El cura Miguel David, responsable del proyecto Puerta Verde en el barrio del Guadalquivir.

El cura Miguel David Pozo, responsable del proyecto Puerta Verde en el barrio del Guadalquivir. / MANUEL MURILLO

"Cuando ayudas a otro no es que te sientas bien, eso es egoísta, pero sí que te sientes útil. No puedes cambiar el mundo, pero si un chico de la calle se ha duchado, ha cenado, ha vivido bajo techo y le has querido un poco, cuando acaba el día está bien hacer esa suma", explica Pozo, que concluye diciendo que "cuando en esa suma sale el otro, significa que la cuenta está bien hecha".

Suscríbete para seguir leyendo