Emacsa, ejemplo de sostenibilidad y futuro

Cuidar del medioambiente es fundamental para garantizar la protección del planeta y de los recursos naturales. Es por ello que, cada 5 de junio, la sociedad conmemora el Día Mundial del Medioambiente. Con esta celebración, ciudadanos, comunidades y empresas tienen la oportunidad de ampliar sus conocimientos y de crear una conducta responsable para la conservación y mejora del entorno.

«La sostenibilidad debe ser la piedra fundamental que mueva todas nuestras actuaciones».

Rafael Carlos Serrano

— Gerente de Emacsa

Ejemplo de ello es Emacsa. La Empresa Municipal de Aguas de Córdoba está muy concienciada e implicada con la protección del medioambiente y sobre todo, con la del recurso que gestiona, el agua. Y es que, según los estudios realizados por la Junta de Andalucía sobre el cambio climático en nuestra comunidad, para el periodo de 2011-2040 se prevé un descenso del 10,3% en el valor medio de las lluvias en Córdoba, y un incremento del 1,51 ºC en la temperatura media anual.

Emacsa, la empresa que gestiona una de las mejores aguas de España

Los efectos negativos ya se notan. El calor es cada vez más duradero y las lluvias, más escasas. «La sostenibilidad debe ser la piedra fundamental que mueva todas nuestras actuaciones», ha señalado Rafael Carlos Serrano, gerente de Emacsa. La empresa, comprometida con el medioambiente, ha desarrollado diferentes medidas y programas para promover la cultura ambiental. Están dirigidas a distintos ámbitos de actuación.

Ciudadanía

Con el objetivo de limitar el uso del papel y ser más eficientes, Emacsa ha creado una nueva aplicación móvil para la gestión de los trámites administrativos de sus clientes. Con esta app, los ciudadanos pueden realizar todas sus gestiones a través del teléfono móvil sin necesidad de desplazarse y sin tener que aportar ningún documento en papel, apostando por la digitalización como motor del cambio hacia la sostenibilidad. 

Proveedores

En todas y cada una de las licitaciones que la empresa saca a concurso público, se exigen unos requisitos medioambientales para la correcta ejecución de las obras. Están relacionados, principalmente, con los materiales reciclables y con la sostenibilidad.

Las obras del primer tanque de tormentas de Córdoba se iniciarán en 2023.

Lo mismo ocurre con las empresas que realizan distintas labores de mantenimiento en Córdoba, ya que también deben ser sostenibles en toda su gestión. Desde sus vehículos, hasta los materiales utilizados para las obras de la ciudad.

Ayuntamiento de Córdoba

Ante el período de sequía en el que estamos, cuidar del agua es esencial. En este sentido, Emacsa utiliza agua no potable para el baldeo de calles y para el riego de los jardines de la ciudad. «De esta forma, utilizamos para riego el agua de lavado de filtro de Villa Azul, que se distribuye por los principales parques de Córdoba», ha indicado Serrano. Asimismo y mediante esta conducción, Sadeco puede cargar el agua no potable en sus camiones y barredoras para baldear la ciudad. 

Ámbito corporativo

Emacsa tiene clara su visión de futuro. En materia medioambiental, la compañía ha desarrollado diferentes medidas sostenibles entre su equipo de profesionales. Se ha eliminado el papel y en su lugar, los trabajadores han recibido tablets o teléfonos móviles para realizar los partes diarios de trabajo.

También se han instalado placas solares fotovoltaicas para aprovechar la energía solar en las principales sedes de la empresa, lo que permite un uso importante de energía limpia para el desarrollo del trabajo, y además, con estos paneles se cargan los coches eléctricos de la empresa, habiendo renovado en los últimos años todos los vehículos hacia los eléctricos y gas licuado, mucho más sostenibles.

Tanque de tormentas

Como medida sostenible estrella, medioambientalmente hablando, se ha iniciado el proyecto del primer gran tanque de tormentas de Córdoba. Se trata de una construcción soterrada que, durante los episodios de lluvia intensa, acumulará gran parte de las aguas pluviales con el objetivo de que el colector no entre en carga y aglutine el recurso. Después, el agua se vehiculará hasta la Edar La Golondrina, se depurará y finalmente se verterá en el Río Guadalquivir. Este estanque de tormentas será el primero de los cinco que se van a crear. Las obras, que se iniciarán en 2023, tendrán una duración de 24 meses. «Es el camino para que, medioambientalmente, la ciudad de Córdoba tenga un tratamiento completo de sus aguas residuales», ha destacado el gerente de Emacsa.