hostelería

Horeca cree que el decreto de música en terrazas servirá para descubrir a los incumplidores

Otra asociación vecinal, en este caso San Lorenzo Existe, muestra su rechazo a este permiso

Noelia Santos

Noelia Santos

Horeca, una asociación que aglutina a varias empresas de hostelería de Córdoba y provincia, cree que la modificación del decreto que permitirá poner música en terrazas de bares y restaurantes servirá para descubrir a aquellos negocios incumplidores. Según el presidente de Horeca, Miguel Ángel Morales, hay negocios de hostelería que ahora mismo operan sin licencia de veladores e incluso sin licencia de apertura, por lo que entiende que una vez entre en vigor el cambio de la norma, si se solicita por parte de estas empresas el poder poner música se detectará que no cuenta con los permisos.

Más allá de esta visión de la normal, Morales afirma entender el malestar vecinal que se crea en torno al tema, sobre todo en el casco histórico. Por esto, es partidiario de poner coto al horario permitido por la Junta de Andalucía. El Gobierno andaluz permitirá que en zonas de gran afluencia turística (como es el caso de Córdoba capital al completo durante cuatro meses al año) se pueda poner música en terrazas de hostelería (en directo o grabada) durante seis meses al año y en horario de 13.00 a 00.00 horas.

Considera el presidente de Horeca que teniendo en cuenta que ahora mismo existe una "paz social" entre vecinos y hosteleros, habría que mantenerla y cortar la música, por ejemplo, a la hora de la siesta para intentar todo lo posible respetar el derecho al descanso.

Más rechazos

Mientras tanto, los rechazos a esa ampliación que se hace para zonas como Córdoba siguen llegando. A las denuncias del Consejo de Distrito Centro y de la asociación vecinal La Axerquía se suman las de la asociación San Lorenzo Existe, que recuerda que las molestias que puede causar la medida son las mismas que ya se denunciaron durante las cruces o el evento que tuvo lugar hace pocas semanas en el cine Fuenseca y que "hacía imposible soportar en la viviendas el volumen de la música contraviniendo ordenanzas y posturas de la Organización Mundial de la Salud (OMS)".