SALUD

Un podcast para desmontar falsos mitos sobre alimentación que generan malos hábitos

El hospital Reina Sofía, la Escuela Andaluza de Salud Pública y la Sociedad Andaluza de Endocrinología, Diabetes y Nutrición se alían para fomentar una dieta equilibrada

Equipo que ha participado en la creación de este podcast de salud.

Equipo que ha participado en la creación de este podcast de salud. / CÓRDOBA

El Hospital Universitario Reina Sofía, la Sociedad Andaluza de Endocrinología, Diabetes y Nutrición (Saedyn) y la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP) impulsan la campaña Desmontando mitos con salud ¿Es verdad que…?’.  La delegada de Salud y Consumo, María Jesús Botella, ha presentado esta mañana la iniciativa acompañada por la directora gerente del hospital, Valle García, la directora de la EASP, Blanca Fernández-Capel, y la presidenta de la Saedyn, María Ángeles Gálvez.

Desmontando mitos con salud ¿Es verdad que…?’ se centra en esta primera edición en la alimentación con el objetivo de continuar desarrollando en un futuro otras líneas independientes dirigidas a contrarrestar bulos de diferentes materias en las que también se genera desinformación como, por ejemplo, la sexualidad.

El doctor Alfonso Calañas es la voz que a lo largo de los ocho episodios intentará resolver cuestiones como si el pan en gorda, si no se debe beber agua con la comida, si la fruta engorda si se come después de la comida o si el zumo de limón o pomelo en ayuna quema grasa. Las respuestas a ese tipo de preguntas se recogen en ocho mini píldoras informativas (de unos 3 minutos de duración de media que van precedidas de publicidad si no estás suscrito al podcast) que se irán publicando cada 15 días dentro del canal de podcast del Hospital Reina Sofía ‘Un Podcast de Salud’.

Ingesta adaptada a cada persona

El doctor Calañas ha explicado que “esta campaña recoge algunas de las dudas o creencias más asentadas en la población, pero que también comparten muchas de las personas que llegan a nuestras consultas. Es importante que tomemos conciencia sobre nuestra alimentación, que nos informemos bien y que entendamos que la alimentación no es estándar, es decir, que cada persona tiene unas características concretas que hará que un alimento le aporte más o menos beneficios y, por último, recordar que el mejor modelo de alimentación lo tenemos al alcance de nuestras manos y lo conocemos sobradamente, porque es la dieta Mediterránea”. El doctor Calañas ha explicado la necesidad de apostar de forma estratégica por acciones que ayuden a contrarrestar la mala alimentación y las enfermedades que derivan de ésta.

Estilos de vida y enfermedades crónicas no transmisibles

La evidencia científica pone de manifiesto la estrecha relación entre los estilos de vida y la aparición de enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT), como la diabetes, obesidad, hipertensión, etc. en los que una alimentación no equilibrada y la falta de ejercicio son factores determinantes. Concretamente, según los datos de la Organización Mundial de la Salud, las ECNT matan a 40 millones de personas cada año, lo que equivale al 70% de las muertes que se producen en el mundo.

Según el doctor Calañas, es importante tener presentes las recomendaciones de las cantidades recomendables diarias, por ejemplo, que establece la OMS. En esta línea, la ingesta calórica debe estar equilibrada con el gasto calórico. Para evitar un aumento malsano de peso, las grasas no deberían superar el 30% de la ingesta calórica total.

Cuánta azúcar tomar

En el caso del azúcar, sería recomendable limitar el consumo de azúcar libre a menos del 10% de la ingesta calórica total o, por nombrar otro ejemplo, también es aconsejable mantener el consumo de sal por debajo de 5 gramos diarios (equivalentes a menos de 2 g de sodio por día). En cuanto a las dietas y patrones alimentarios, los especialistas recuerdan que no existe mucha evidencia al respecto, aunque sí apuntan que han surgido componentes comunes como, por ejemplo, los patrones altos en carne procesada, granos refinados, productos lácteos altos en grasa, huevos y alimentos fritos, que se asocian positivamente con el riesgo de diabetes tipo 2 y cáncer colorrectal, y los patrones altos en verduras, legumbres, las frutas, las aves y el pescado se asociaron inversamente con el riesgo.