Unos 4.000 cordobeses podrán dejar de fumar con el medicamento Todacitan

Al menos unos 4.000 cordobeses y cerca de 40.000 andaluces, que es la cifra media aproximada de personas que cada año intenta dejar el tabaco tomando una medicación indicada por la sanidad pública, podrán optar a deshabituarse con Todacitan, el nuevo fármaco que desde la semana pasada se financia en Andalucía y resto de España. La cifra de demandantes de este tratamiento al año seguramente puede que sea superior, ya que según el director del Plan Andaluz de Tabaquismo de Andalucía (PITA), Marcos García, «cada vez más la población se está dando cuenta de la importancia de cuidar su salud y eso es algo que hay que apoyar. A raíz de la pandemia muchas fumadores se están planteando que deben intentar dejar este negativo hábito».

El Todacitan, un medicamento que se administra por vía oral en formato pastillas, comenzó a financiarse con cargo a la sanidad pública española y andaluza a partir de finales de la semana pasada, pero anteriormente también se recetaba, aunque tenía que ser costeado en su totalidad por la persona que quería dejar de fumar, señala Marcos García.

Solo se puede comprar con receta médica

García indica que el Todacitan no se puede comprar sin receta médica. Para que este medicamento sea financiado por la sanidad pública debe ser prescrito por un médico a través del sistema de receta electrónica. «El sistema sanitario público andaluz financiará un único intento de dejar de fumar con este fármaco por año», aclara el director del Plan Andaluz de Tabaquismo de Andalucía.

España, el único país europeo que financia el nuevo fármaco para dejar de fumar

Desabastecimiento puntual

La expectación que ha generado la financiación de este medicamento para dejar de fumar ha provocado que en la actualidad sea muy complicado poder adquirirlo en una farmacia de la provincia o de otro punto del país, señala el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Córdoba, Rafael Casaño. El Colegio de Farmacéuticos espera que este déficit de unidades se resuelva lo antes posible.

Eficacia

Sobre la eficacia de este medicamento, Marcos García recuerda que el Todacitan por sí solo no tiene por qué lograr que una persona deje de fumar. García aconseja que, de forma complementaria, la persona decidida a abandonar el consumo de cigarrillos debe formar parte de un programa de deshabituación tabáquica de la sanidad pública, que contempla tanto terapias individuales como grupales, o recibir seguimiento por parte de su médico de familia o especialista.

Deshabituación en 25 días

La principal novedad del Todacitan frente a los otros dos medicamentos anteriores que venía indicando la sanidad pública para lograr la deshabituación tabáquica es que persigue lograr que la persona deje de fumar en 25 días, frente a los tres meses de media del Champix (vareniclina) y Bupropion (Zyntabac). 

Champix y Bupropion no se encuentran ahora mismo en el mercado porque se retiraron para ser reformulados, debido a que se hallaron nitrosaminas (compuestos químicos relacionados con el cáncer) en su producción.  

Fármaco de origen vegetal

El Todacitan, por lo general, es un medicamento bien tolerado, que cuenta como componente principal la citisina, un alcaloide vegetal que se extrae de árboles. Este fármaco, de fabricación polaca, consigue que la nicotina no llegue a los receptores y, por tanto, elimina la sensación de placer, reduciendo así la ansiedad y la dependencia de la nicotina.

¿A quién se dirige este medicamento?

Este nuevo medicamento está indicado principalmente para personas que deseen dejar de fumar, que presenten una alta dependencia del tabaco y que consuman más de 10 cigarrillos al día. No pueden tomarlo mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, personas con patologías psiquiátricas no controladas, dolencias cardiovasculares agudas y alergia al medicamento citisina.

En la provincia fuma aproximadamente un 25,5% del total de población (algo más de un 23% de mujeres frente a un 27% de hombres) en el tramo que va de los 18 a los 65 años. Marcos García resalta que "entre la población general apreciamos que ha descendido el consumo de tabaco en los últimos años, lo que pasa es que no contamos con encuestas recientes. Sin embargo, entre los fumadores que presentan algún trastorno mental, como consecuencia de la pandemia, el hábito se ha acentuado".

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