el plan estratégico propone cuatro ejes de trabajo con vistas a 2030

'Agenda Córdoba', el camino hacia una ciudad más culta, sostenible e igualitaria

El documento observa 14 líneas de actuación en el marco de los ODS europeos | Gira sobre ejes como economía, cultura, innovación, reequilibrio social y sostenibilidad

La ‘Agenda Córdoba’ dibuja un camino más sostenible de la ciudad en los próximos 7 años.

La ‘Agenda Córdoba’ dibuja un camino más sostenible de la ciudad en los próximos 7 años. / A.J. González

Irina Marzo

Irina Marzo

La Agenda Córdoba, aprobada esta semana, pretende marcar las estrategias y proyectos de cara a un crecimiento inteligente, sostenible e integrador de la ciudad para el 2030. Se trata de un plan estratégico, una hoja de ruta que toma en consideración el marco y los parámetros de las agendas urbanas española y andaluza, y los criterios de trabajo de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030. El documento incluye 4 ejes estratégicos y 14 objetivos fruto del diagnóstico de situación realizado, así como de las sesiones de trabajo con la comisión delegada y de los resultados de los procesos participativos (entrevistas, grupos de trabajo y encuestas online a la ciudadanía). Estas son algunas de sus propuestas.

Córdoba empresarial | Innovación, posición y transformación

El documento expresa la necesidad de que Córdoba desarrolle una estrategia que dé respuesta al desafío de situarse a la cabeza de la innovación y el desarrollo tecnológico e impregne todas las líneas de actuación de la ciudad. Este eje pivota, cómo no, en la futura base logística del Ejército, uno de los proyectos llamados a liderar la transformación económica de la ciudad. «El carácter tractor de este proyecto destaca sobre todo por su apuesta por una industria inteligente e innovadora que hará de Córdoba un centro referente en tecnología, transferencia e investigación gracias a la cooperación entre instituciones, universidades y el sector empresarial».

Por ello, la propuesta es reforzar la conexión entre las universidades y el tejido empresarial para incentivar la innovación; apoyar el desarrollo de proyectos público-privados para favorecer un ecosistema de innovación en la ciudad; coordinarse para impulsar una oferta formativa adaptada a las necesidades del mercado, y consolidar estructuras de gobernanza y liderazgo que favorezcan la coordinación, el trabajo en red y la transparencia.

¿Pero cómo se piensan llevar a cabo esos retos? Algunas de las propuestas pasan por que las administraciones participen en redes de innovación y proyectos europeos (en el contexto del Programa Europeo Horizonte 2020); por que Junta y Ayuntamiento incentiven la inversión privada en I+D+I y sensibilicen a empresas para reinvertir beneficios en I+D+I; construir un laboratorio de ciudad innovadora (smarcity lab), como sistema de apoyo a la transferencia de tecnología y conocimiento, o poner en marcha un programa de apoyo para la creación de start up y spin off (iniciativas empresariales promovidas por miembros de la comunidad universitaria), mediante la creación de espacios para la incubación y líneas de subvención.  

Por otro lado, el plan recoge la necesidad de promover la transformación del tejido empresarial hacia los nuevos modelos de la economía social, sostenible y digital, apoyando a las empresas locales para que gestionen ese cambio, esa transición digital. 

Asimismo se busca el posicionamiento de la identidad de Córdoba como territorio empresarial y centro de referencia logístico, para lo que es necesario la ejecución de infraestructuras necesarias de transporte (como el ramal Central) y otras en materia de telecomunicaciones y suministros; o la mejora y modernización de las áreas industriales y espacios productivos de la ciudad (mediante programa de inversiones).

Por último, dentro de este primer eje más económico se insta a impulsar el desarrollo del capital humano con la creación de un programa de atracción y retención de talento (en colaboración con universidades, centro de investigación y sectores estratégicos).

Ciudad de cultura y arte | Ordenar y coordinar la oferta cultural

La Agenda Córdoba recomienda ordenar y coordinar su oferta patrimonial y cultural, consolidando su imagen de ciudad patrimonial y cultural del siglo XXI que la defina y posicione internacionalmente. Para ello, debe apostar por la conservación y la puesta en valor de sus activos y la dotación de una planificación local adaptada a los nuevos tiempos, los cuales demandan una renovación cultural que ilusione a la ciudadanía y atraiga a los turistas.

Para ello es prioritario optimizar los recursos y establecer una coordinación conjunta entre las administraciones competentes. Debe existir una oferta única, variada, abierta y permanente, que evite duplicidades o actividades que pueden incluirse en otras para reforzarlas y no provocar dispersión.

Para conseguir estos objetivos, la propuesta pasa por liderar un gran pacto en torno al modelo de ciudad cultural que garantice la conservación y puesta en valor de sus activos (Plan Director del Patrimonio y la Cultura o creación del Observatorio de la Cultura). Además se apuesta por definir un nuevo objetivo o hito temporal clave para la promoción de la ciudad (ejemplo Expo Málaga 2027, retomar la candidatura a capital cultural). 

Para garantizar la conservación del patrimonio se recomienda la redacción e implementación de un plan de turismo sostenible, y la ejecución del Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico de Córdoba.

Por otro lado, se quiere que Córdoba apueste por nuevos recursos que contribuyan a poner en el centro de la actividad turística los activos patrimoniales y culturales existentes. Para ello se sugiere transformar el entorno del río como activo de ciudad (puesta en valor de los Sotos de la Albolafia), y apoyar nuevas iniciativas para la consolidación de Córdoba como destino de congresos y eventos con los nuevos equipamientos como el Centro de Exposiciones, Ferias y Convenciones (CEFC). Además se apuesta por la formación y la especialización de jóvenes profesionales del sector de la cultura y el arte, a través de programas de ayudas y becas.

Equilibrio social | Igualdad de oportunidades

La Agenda Córdoba estima que la ciudad debe aprovechar y mejorar las importantes redes de colaboración social ya existentes, así como impulsar el desarrollo de otras nuevas. Los servicios sociales de base, dice el documento, son una poderosa herramienta como puerta de acceso al sistema, que permiten hacer efectivos los derechos sociales y desarrollar estrategias. Para ello, la propuesta es desarrollar un sistema de coordinación entre programas sociales para evitar la duplicidad, y fomentar la innovación social como camino hacia la innovación (colaboración con universidades y entidades sociales en proyectos e iniciativas de transferencia). 

Por otra parte, para reducir los problemas de exclusión social, vulnerabilidad y convivencia se recomienda incrementar los recursos destinados a políticas activas de inclusión social y laboral, y dar continuidad a los planes integrales de intervención para la regeneración económica y social de barrios desfavorecidos (ERACIs).

En tercer lugar se busca dar ideas para garantizar el derecho a la vivienda que pasan por desarrollar un programa específico de rehabilitación centrado en la eficiencia energética y la mejora de la accesibilidad y desarrollar el Plan Municipal de Viviendas y Suelo de Córdoba (en revisión).

Sostenibilidad | Un río más cercano y verde

La Agenda Córdoba señala la necesidad de apostar por una revitalización urbana integrada, centrada en la rehabilitación y puesta en valor del eje del Guadalquivir, la dotación de zonas y corredores verdes, y la integración de las áreas industriales en el medio urbano. Las propuestas en este sentido son rehabilitar el entorno del río para la conformación de una gran área de naturaleza urbana y la culminación del anillo verde. 

Por otro lado, ya que Córdoba cuenta con grandes potencialidades para mejorar su calidad ambiental gracias a la disponibilidad de recursos (sol, tierras dedicadas a la agricultura y biodiversidad) se aconseja apoyar el desarrollo de proyectos piloto para la constitución de comunidades energéticas y avanzar hacia un modelo de movilidad sostenible con alternativas de transporte público; utilizar los planes y heramientas ya disponibles (plan de calidad del aire, plan climático...) o incorporar criterios de contratación sostenible en los pliegos de contratación pública.

Suscríbete para seguir leyendo