El anuncio de la subida del salario mínimo interprofesional (SMI), que subirá a 1.080 los ingresos de unos 90.000 trabajadores que hasta ahora estaban por debajo con fecha 1 de enero, ha provocado reacciones opuestas entre los representantes sindicales de Córdoba y de sectores afectados como el agrícola o las organizaciones sociales prestadoras de servicios.
CCOO Y UGT: una subida necesaria
Del lado de los que celebran la medida están los representantes de acción sindical de CCOO y UGT. Aurelio Martín (CCOO) considera que la subida era "necesaria en la actual coyuntura económica" en la que, recuerda, "la inflación afecta principalmente a la cesta de la compra y en mayor medida a las familias con menos recursos". Tras señalar que serán mayoritariamente mujeres y jóvenes los beneficiados de forma directa, asegura que "también saldrán ganando de forma indirecta el resto de trabajadores en la medida en que el salario mínimo es el que se toma como referencia en los límites de pago de las indemnizaciones por despido de Fogasa y para los afectados por embargo, a los que habrá que respetar el ingreso mínimo de 1.080 euros". Para CCOO, "muchas empresas han multiplicado en los últimos meses sus beneficios aumentando los precios de sus productos, pero no los han repercutido en los salarios de sus trabajadores" y ahora se verán forzadas a ello. Para el portavoz de UGT, Jaime Sarmiento, la subida del salario mínimo tendrá un impacto especialmente positivo en Córdoba, ya que el volumen de trabajadores a los que afectará será superior al de otros territorios, como demuestra el hecho de que "la media salarial en la provincia está muy por debajo de la nacional y a la cola de Andalucía". En su opinión, "esto permitirá reducir la brecha de salarios de Córdoba respecto a otras provincias. Asimismo, coincide con CCOO en que "es una medida buena para el consumo, ya que el gasto de los trabajadores irá directamente a la cesta de la compra y productos básicos".
Asaja y UPA: un momento crítico para el sector
En Córdoba, la subida afectará al 35% de los trabajadores según UGT, unas 90.000 personas, según IU. Los sectores afectados por esta subida serán principalmente los de la limpieza, el tercer sector, la ayuda a domicilio y el campo. Los hoteles y negocios de hostelería no se verán afectados, ya que el convenio que se aplica en ambos casos no contempla ninguna categoría por debajo de 1.080 euros, según han confirmado Hostecor y Aehcor.
Precisamente, Asaja Córdoba ponía este miércoles el grito en el cielo por la nueva subida del salario mínimo. Recuerdan que con el nuevo incremento pactado entre Gobierno y sindicatos, "el salario mínimo ha aumentado en los últimos cinco años 344 euros, lo que repercute además en las bases mínimas de cotización". A este "disparatado" incremento de los costes salariales, señalan, "se añaden la subida de precios en todos los bienes de producción", por lo que "la viabilidad del sector atraviesa un momento crítico", lo que hará que "se dispare el número de explotaciones abocadas al cierre". El jornal, que estaba actualmente en 53,4 euros, pasa a 57 euros, a lo que habrá que sumar los costes sociales y de gestión, lo que supondrá un total de en torno a 75 euros.
El secretario general de UPA Córdoba, Miguel Cobos, ha valorado positivamente la subida de cara a los trabajadores, pero considera que "cualquier aumento de los costes de producción debería reflejarse en los precios de venta al público de los productos y eso no está ocurriendo porque no se controla el cumplimiento de la ley de cadena alimentaria". En este sentido, recuerda el incremento importante registrado en los costes de los fitosanitarios, abonos, gasóleo, electricidad, a lo que se sumará ahora el aumento de la partida salarial. "Para garantizar la supervivencia de las explotaciones", afirma, "es necesario que se coordine la Agencia de Información y Control Alimentario que depende del Estado y la Dirección General de Agricultura de la Junta de Andalucía, que es la que el personal para ello, y vigilar que los precios de venta de los productos no estén por debajo de los costes de producción como está ocurriendo". A este respecto, Aurelio Martín de CCOO responde que "son las empresas quienes tienen que pelear por el precio justo del producto y no pretender que recaiga sobre el eslabón más débil".
Empresas del tercer sector: un escenario muy preocupante
Las empresas del tercer sector, en las que una parte mayoritaria de los trabajadores cobran el salario mínimo, también se verán afectadas por la subida. Según Blas García, presidente de Prode, una entidad sin ánimo de lucro que da empleo a 800 personas, "la situación que se abre es muy preocupante". Según relata, "la subida supone un descalabro de las cuentas, ya que nuestra actividad empresarial se centra en el sector servicios, donde los márgenes de beneficios son muy estrechos, y en nuestro caso además, lo hacemos con precios muy ajustados". García señala que los ingresos no van a subir, "pero los costes, que ya han aumentado notablemente por la inflación se van a disparar y tendremos que ver cómo pagaremos 560 euros más por persona al año". Recuerdan que, por ejemplo, los servicios relacionados con plazas concertadas para residencias o centros de día para discapacidad o mayores "la Junta de Andalucía ha aprobado un aumento del coste para este año 4,5% mientras que el SMI crecerá un 8%". Desde que se conoció la noticia, en Prode están analizando los costes para ver cómo harán frente a la factura salarial, algo especialmente complicado para una entidad con 23 unidades de negocio y 800 trabajadores en ámbitos tan variados como un supermercado, una gasolinera o una fábrica de madera. «Estamos analizando cada caso para ver si es viable económicamente». A esto añaden que en muchos casos, «trabajamos con adjudicaciones a varios años que ya están cerradas y que prevén unos costes salariales muy distintos a los que tendremos que asumir en este nuevo escenario».
En la misma línea, la presidenta de Futuro Singular Córdoba, Ángela Amate, explicó que si bien "la subida del salario mínimo interprofesional tendrá un claro impacto positivo en los trabajadores afectados", para las entidades "supondrá un sobreesfuerzo importante". Así, recalca que a pesar de los incrementos de los últimos tres años "seguimos siendo un sector infrafinanciado". Por tanto, la subida del salario mínimo interprofesional, en entidades como Futuro Singular Córdoba, con alrededor de 300 personas afectadas, "tendrá a todas luces, un impacto económico negativo".