en los últimos meses, están empezando a aumentar los problemas con los bancos

El sector eléctrico encabeza el ránking de quejas de los consumidores en 2022

El 61% de las reclamaciones de UCE Córdoba fueron contra estas compañías | Facua también ha destaca el aumento de las quejas relacionadas con las eléctricas

La factura y el suministro eléctrico, principal motivo de reclamaciones de los consumidores en 2022.

La factura y el suministro eléctrico, principal motivo de reclamaciones de los consumidores en 2022. / Eduardo Parra - Europa Press

Araceli R. Arjona

Araceli R. Arjona

Las quejas contra las compañías eléctricas lideraron sin discusión el ránking de reclamaciones de los consumidores en 2022. Según la UCE Córdoba, un 61% de las quejas presentadas el año pasado fueron derivadas de problemas con las distribuidoras o comercializadoras eléctricas, a mucha distancia de las empresas de Telefonía (11), Servicios Bancarios (10%), Seguros (9%) y Comercio online / tradicional (5%).

Carmen Aguayo, portavoz de UCE Córdoba asegura que las reclamaciones se han multiplicado por la situación de «caos» de las empresas a la hora de gestionar el servicio. «Los clientes llegan desesperados por las situaciones dantescas que se les presentan», explica Aguayo, que relata un sinfín de incidencias. «Tenemos usuarios a los que se les ha aplicado el tope del gas meses antes de que fuera legal, ya que estaban en compañías no reguladas y no se había producido contratación nueva ni renovación de contrato, hay contratos que establecen unas condiciones y de buenas a primeras y sin previo aviso se cambian por otras tarifas, tenemos casos de cambios de comercializadoras erróneos que hacen que una vivienda se quede sin suministro porque se han equivocado y le han dado su contrato a otra persona...», explica, «y lo que vemos es que las compañías no están realizando las comprobaciones mínimas para que el servicio sea el adecuado, lo que está provocando un sinfín de situaciones que además tardan demasiado en solventarse».

UCE Córdoba cuestiona, por ejemplo, «que se realicen cambios de suministro sin pedir escrituras de la vivienda o al menos el DNI del titular para verificar que es correcto, ya que al emplear tan solo el número de CUP que, se están produciendo errores que están dejando casas sin suministro, hay personas que están pagando la factura de otra familia o de la comunidad de al lado como hemos visto, tenemos casos de personas que han perdido el bono social durante unos meses porque cancelaron su contrato y se lo asignaron a otro cliente, que suponemos estuvo pagando su consumo durante ese tiempo, hay facturas en las que se aplican tarifas más elevadas, que no son las que se habían contratado, retrasos injustificados en las facturaciones y facturas que simplemente no llegan nunca». En este sentido, culpan «no solo a las comercializadoras sino a la distribuidora que debería velar por la calidad del servicio».

La instalación de placas solares también ha provocado incidencias con las empresas de suministro eléctrico. «Tenemos un caso de una persona que instaló placas en su casa y después de firmar el contrato de la luz a un precio y la compra de los excedentes que genera, la compañía cambia lo estipulado a los dos meses y le está haciendo pagar más de lo previsto y además no está abonando lo que le corresponde por los excedentes», señala, «llevamos desde marzo de 2022 con la reclamación y aún no se ha resuelto».

Cuando se dan estas circunstancias, ante la lentitud de las compañías para resolver las incidencias, muchos usuarios están recurriendo a la junta de arbitraje de consumo de la Junta de Andalucía, «que está totalmente colapsada», señala Aguayo, «con casos cuyo arbitraje se pidió en junio y va a tener la vista arbitral en febrero». 

Facua Córdoba aún no ha recopilado los datos definitivos de reclamaciones de 2022, si bien su presidente, Francisco Martínez Claus, ha adelantado que las reclamaciones relacionadas con el suministro eléctrico, como en el conjunto de España, están entre las más habituales de los consumidores que acuden a la entidad. «Nuestros usuarios se quejan principalmente de que no reciben las facturas del suministro durante meses, lo que hace que después les llegue todo de golpe en una sola muy abultada, de la no aplicación de promociones una vez contratadas y del uso de lecturas estimadas por lo alto durante mucho tiempo, basadas en consumos realizados en años anteriores aunque hay una casuística muy amplia en este sector».

A la luz se ha sumado ahora la preocupación por la hipoteca. UCE Córdoba ha detectado en los últimos meses un incremento de consultas por este tema. «En 2022, casi todo era luz, pero estamos empezando a notar familias que buscan soluciones porque no pueden pagar y quieren saber si tienen derecho a alargar la vida de las hipotecas, en qué condiciones, cuánto de más puede suponerles...». La previsión de UCE es que, junto a las reclamaciones por el suministro eléctrico, este tipo de quejas vayan en aumento por la subida de los tipos de interés. 

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