EL GOBIERNO MANTIENE SU INTENCIÓN DE REFORMAR LA AVENIDA

El Ayuntamiento de Córdoba impulsará medidas de 'urbanismo comercial' en la avenida de La Viñuela

La idea es revitalizar el comercio existente en la zona que se está viendo afectado por la crisis | Los comerciantes reclaman el proyecto prometido por el gobierno local de construir un bulevar

Varios peatones pasean por la avenida de La Viñuela esta semana.

Varios peatones pasean por la avenida de La Viñuela esta semana. / MANUEL MURILLO

Irina Marzo

Irina Marzo

El Ayuntamiento de Córdoba sigue adelante con su idea de consolidar la peatonalización de la avenida de La Viñuela y reformar esta zona comercial paralela a la avenida de Barcelona para convertirla en una especie de bulevar. El delgado de Movilidad, Miguel Ángel Torrico, confirma que se está trabajando en este sentido y que se va a redactar un proyecto para reformar la avenida, en consenso con los colectivos y vecinos de la zona, que reclaman que se haga realidad cuanto antes este proyecto. 

La idea ya fue anunciada en junio del pasado año por el alcalde, José María Bellido, que prometió un arreglo integral de la calle y de su mobiliario. De momento, la avenida continúa igual que cuando en junio del 2020 se tomó la decisión de cortar el tráfico por esta vía de manera temporal. Entonces se flanqueó con macetones de gran porte los extremos de la calle (a la altura de la calle Tras la puerta y Poeta Muhammad Iqbal), aunque las aceras y la calzada siguieron iguales que cuando pasaban vehículos. La idea pasa por actuar sobre La Viñuela de manera integral y convertirla en una auténtica calle peatonal, en una plataforma única, como piden los comerciantes. «Vamos a hacer ese proyecto en consenso con los vecinos», garantizó ayer Torrico. 

Medidas de urbanismo comercial

Mientras que eso ocurre, desde la Delegación de Infraestructuras, su titular, el concejal Antonio Álvarez, también anuncia el impulso de medidas encaminadas a la recuperación del barrio desde el punto de vista comercial. La Viñuela forma parte, junto a la avenida de Jesús Rescatado y las calles aledañas, de un centro comercial abierto que, como todos, ha sufrido los envites de las últimas crisis económicas. «La actividad comercial ha decaído un poquito y tenemos algunos locales vacíos», reconoce Antonio Álvarez

Para ello, el proyecto que van a llevar a cabo a más corto plazo es la aplicación de medidas vinculadas al «urbanismo comercial». Este concepto implica una planificación urbanística específica sobre los establecimientos y las áreas eminentemente comerciales, que incluye «la elaboración de planes, estrategias e iniciativas para la planificación y ordenación de la actividad comercial», potenciando su función como vertebradora del territorio y dinamizadora de los espacios urbanos. Así, con este tipo de actuaciones se identifican los problemas urbanísticos de una determinada zona y se proponen actuaciones de mejora encaminadas a mejorar la actividad comercial del barrio. Las actuaciones de mejora urbanística pueden incluir desde diseño urbano y cartelería, a mejoras de la accesibilidad, la movilidad o la imagen y el paisaje comercial.

Un peatón camina por el centro de la avenida de La Viñuela.

Un peatón camina por el centro de la avenida de La Viñuela. / MANUEL MURILLO

El edil de Ciudadanos explica que próximamente se iniciarán los contactos con los vecinos y los comerciantes con este fin. En principio estas medidas no conllevan obras y se financiarían con fondos propios. «Se harán paulatinamente de aquí al verano», comenta el responsable de la delegación.

Manuel Rubio, vicepresidente de la Asociación de Comerciantes y Empresarios de La Viñuela, cree que este es «un momento clave» y que si esta primavera, antes de las elecciones, se presentara el proyecto de reforma «se abrirían expectativas que serían buenas en todos los frentes; el es el momento de apostar por La Viñuela», dice convencido. 

Los comerciantes y los colectivos vecinales se reunieron antes de las elecciones autonómicas con representantes del equipo de gobierno (acudieron Isabel Albás, Miguel Ángel Torrico y Antonio Álvarez) para abordar la reforma y las necesidades que tiene el barrio. «Lo que hace falta es que ese proyecto que se iba a presentar se nos presente pronto. Que podamos ver algo de lo que se esté haciendo y ponerlo en marcha lo antes posible porque es lo que deseamos», apostilla el representante.  

Rubio recuerda que el comercio de cercanía atraviesa desde hace meses una situación difícil: «Estamos pasando por muchos factores: covid, inflación, guerra.... Si hay una serie de medidas que pueden servir de estímulo para el comercio, hay que tomarlas lo antes posible y antes de que esto decaiga», defiende. «Hay personas interesadas en invertir en La Viñuela, pero que no lo han hecho ante la incertidumbre de saber cómo va a quedar la avenida», añade. «La gente no se cree las palabras, se cree los hechos, las personas cuando va a invertir lo que quiere son hechos», concluye.   

Tarjetas magnéticas para el aparcamiento de San Rafael 

Cuando se cortó el tráfico en la avenida de La Viñuela, una de las principales demandas de los vecinos fue la recuperación de las plazas de aparcamiento que se habían perdido en la zona restringida. La Delegación de Movilidad propuso en septiembre acondicionar el aparcamiento que hay junto al cementerio de San Rafael para el uso exclusivo de los vecinos afectados por la peatonalización, convirtiéndolo en una zona naranja. La asociación de comerciantes cedió entonces parte de ese aparcamiento para uso vecinal. «Finalmente se vio que se necesitaría entero y lo cedimos todo para que puedan aparcar los vecinos», comenta Manuel Rubio. 

El delegado de Movilidad, Miguel Ángel Torrico, explicó ayer a este periódico que en breve se llevará a cabo el reparto de tarjetas magnéticas para el acceso a este aparcamiento que se ha dotado de una barrera que solo permitirá el paso a los vecinos. Asimismo, el párking dispone ya de cámaras que reconocerán las matrículas según el censo de vehículos facilitado por Movilidad. 

La idea que tiene este departamento es seguir las mismas directrices que se han hecho en el aparcamiento de zona naranja de la plaza de toros. Esto quiere decir que en un principio se van a repartir un número de tarjetas magnéticas proporcionales a los residentes de La Viñuela y su entorno (en el caso de Ciudad Jardín se distribuyeron inicialmente 530 tarjetas), y más tarde si hiciera falta se ampliaría el cupo. Eso es lo que ha ocurrido de hecho en la plaza de toros, donde el Ayuntamiento ha ampliado el cupo de residentes con derecho a aparcar en este espacio restringido.

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