El macroproyecto generador de energía de Sadeco costará más de 140 millones

Ampliar el complejo medioambiental de Sadeco con cinco proyectos con los que la empresa municipal persigue reducir la huella de carbono aprovechando los residuos urbanos para generar energía costará más de 140 millones de euros (97,4 millones de presupuesto de ejecución material más los gastos generales, el beneficio industrial y el IVA). Ese es el presupuesto recogido en el proyecto que se encuentra desde esta semana en exposición pública durante un mes para la presentación de alegaciones. Ese dinero, que en otra parte del proyecto se cuantifica en 150 millones, servirá para que el complejo medioambiental Juan Rivilla, que se encuentra a 6,5 kilómetros de la ciudad en una superficie de 70 hectáreas, cuente con un nuevo vaso de vertido, un parque solar fotovoltaico, una estación de combustible de hidrógeno y gas vehicular, una planta de tratamiento de bioresiduos y otra destinada al tratamiento de rechazos mediante tecnologías de generación de biocombustibles, biochart y syngas (pirólisis e hidrogasificación) con zona de almacenamiento. Con todo ello, se pasará de las 103.984 toneladas de residuos registradas en el 2022 a las 81.084 previstas para el 2032.

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El vaso de vertido se llevará a cabo en dos fases (la primera, presupuestada en 7 millones, y la segunda, en casi 10) por el gran volumen de movimiento de tierras que supondrá su ejecución. Con el nuevo vaso, el complejo tendrá en la primera fase una capacidad adicional de vertido de 309.643 toneladas y una vida útil de 4,33 años mientras que en la segunda la cifra subirá a 3.808.674 toneladas y 57,76 años. Una vez que finalice su vida útil, y según la documentación consultada por este periódico, el vaso del vertedero de residuos no peligrosos será sellado y se procederá a su revegetación. El proyecto se completará con viales, alumbrado, elementos de protección contra incendios y cerramiento.

Otras instalaciones

Junto al nuevo vaso de vertido habrá un espacio de 110.132 metros cuadrados en el que estará el parque solar fotovoltaico (78.735 metros) y el resto de instalaciones previstas (18.324), entre ellas, la planta de producción de hidrógeno y gas vehicular (cuyo anteproyecto ya entró en información pública en octubre), que está presupuestada en 34,2 millones. La planta logrará biogás a partir de los residuos orgánicos. El objetivo es conseguir 448 toneladas de gas natural y 41 de hidrógeno para uso de la flota de vehículos de Sadeco y para su comercialización por la empresa concesionaria.

El complejo contará también con una planta de biotratamiento de residuos orgánicos con la que Sadeco pretende generar harina proteica, que es el sustitutivo de harinas usadas en la alimentación del ganado, mediante "la biodigestión aerobia de los residuos orgánicos", de forma que se reduzca el depósito a vertedero. La planta ocupará una superficie de 5.000 metros cuadrados, costará 2,4 millones y las estimaciones son que valorice anualmente 15.000 toneladas de bioresiduo.

Otro proyecto es la instalación prevista de tratamiento de rechazos mediante tecnologías de generación de biocombustibles, biochart y syngas y una zona de almacenamiento en una superficie de 4.036 metros cuadrados. El objetivo, según consta en el proyecto, es generar productos comercializables "como el biodiésel y el char mediante el tratamiento de los rechazos de las líneas de tratamiento de orgánica y envases" evitando el depósito de estos residuos en vertedero. En este caso, dada su complejidad, la idea es realizar primero una planta piloto para verificar su viabilidad. Su capacidad de tratamiento será de 25.000 toneladas al año y tendrá un coste de 13,7 millones.

El parque solar tendrá tres zonas, una de 16.500 paneles con una potencia de 6,7 megavatios en una superficie de 78.735 metros cuadrados; otra, con 41.000 paneles y una potencia nominal de 16,6 megavatios en una superficie de 194.505 metros cuadrados; y, por último, una tercera, con 36.750 paneles con potencia de 14,9 megavatios en 147.737 metros cuadrados. Este proyecto está valorado en casi 30 millones.

En cuanto a los plazos, solo para la fase primera del vaso de vertedero se necesitarán doce meses. El tiempo que precisarán el resto de instalaciones no viene especificado en el proyecto. Sadeco deberá tramitar una modificación de la Autorización Ambiental Integrada que ya posee y el estudio medioambiental. Además, y ante la proximidad del paraje de Origuero, ha de llevar a cabo un control arqueológico.

El alcalde, José María Bellido, junto al consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta de Andalucía, Ramón Fernández-Pacheco, presentó en septiembre el proyecto Sadeco 5.0, que forma parte del plan contra el cambio climático y es como se ha bautizado esta operación de ampliación en la que jugará un papel fundamental la iniciativa privada. En el caso de la estación de servicio, como ya adelantó este periódico, una empresa privada ejecutará el proyecto, lo gestionará y venderá el exceso de combustible que se produzca una vez abastecida la flota de Sadeco.

Los planes de Sadeco

La empresa municipal Sadeco confía en que durante este primer trimestre el consejo de administración dé el visto bueno a los pliegos de condiciones del concurso para elegir mediante un proceso de concesión administrativa a la empresa que se encargará de construir y gestionar las nuevas instalaciones. De esa forma, Sadeco "pondrá el suelo y la materia prima (los residuos) y la empresa realizará el tratamiento y hará que sea rentable" el proyecto, según indica el gerente de la empresa municipal, Francisco Ruiz, que asegura que el nivel de interés que suscita la iniciativa entre las empresas es "alto", ya que "el hidrógeno verde tiene un futuro prometedor". En este sentido, hay que recordar que la naviera Maersk invertirá 10.000 millones de euros en plantas de hidrógeno verde en Galicia y Andalucía (Algeciras o Huelva se perfilan para acoger una de las dos previstas en España). La ubicación exacta se decidirá a mitad de este año. Además, la base logística del Ejército de Tierra "trae un departamento de investigación de hidrógeno verde", explica.

Su idea es llevar los pliegos al consejo de administración en febrero, una vez culminado el plazo de exposición pública y si no se presentan alegaciones durante el mismo. Ruiz ha precisado que el presupuesto total de la ampliación del complejo medioambiental es estimado y que puede haber variaciones. Según señala, las primeras actuaciones se centrarán en el vaso de vertido y en la planta de hidrógeno, mientras que el resto de obras llegarán después "en cascada". El gerente de Sadeco indica que al vaso de vertido actual le quedan "de cinco a ocho años de vida" y que hay que planificar y ejecutar uno nuevo. Ruiz asegura que con esta iniciativa "el 90% de los residuos que van a vertedero se van a reducir".

La ampliación del complejo y su conversión en fuente de energía traerá otros beneficios a Sadeco, sobre todo, a partir de la aplicación desde enero de un impuesto que grava el uso de vertederos. El gerente de Sadeco explica que "por cada tonelada de residuos hay que pagar 30 euros, lo que implica un gasto anual de 4 millones al año", que la empresa municipal tiene que pagar al Gobierno central por usar el vertedero.

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