Fallece Juan Carlos Limia, director general de Cultura del Ayuntamiento de Córdoba y gerente del IMAE

El gestor cultural Juan Carlos Limia, ligado a la delegación de Cultura del Ayuntamiento de Córdoba desde hace casi treinta años, ha fallecido este jueves a los 62 años tras una enfermedad diagnóstica hace relativamente poco tiempo que ha acabado con su vida.

Aunque comenzó su andadura municipal en el ámbito de los servicios sociales, su mundo siempre ha sido la cultura y en los últimos años ha ejercido como director general de Cultura del Ayuntamiento de Córdoba y como gerente del Instituto Municipal de las Artes Escénicas (IMAE), un cargo que no le era desconocido puesto que lo desempeñó desde 2011 al 2016.

“Ha sido un regreso a un mundo conocido por mí, igual que el equipo, y todo eso me ha facilitado ponerme con la mayor rapidez posible a realizar mis tareas”, señalaba entonces a este periódico Limia,  que tuvo que afrontar el periodo de la pandemia en los teatros municipales.

Con una inquebrantable vocación por la cultura, Limia dirigió muchos proyectos como la Bienal de Fotografía, un evento por el que siempre se sintió muy atraído.

Tras conocer su fallecimiento, el alcalde de Córdoba, José María Bellido, ha declarado en redes sociales que es "una tristísima noticia", puesto que "Córdoba pierde a una persona clave en el mundo de la cultura y a un gran trabajador y servidor público", ha lamentado, trasladando su "más sincero pésame a sus familiares y muchísimos amigos".

Inició su carrera en el Ayuntamiento de Córdoba en el año 1986 como psicólogo. Fue Jefe del Departamento de Servicios Sociales, adjunto al Jefe del Área de Bienestar Social. Después, pasó al área de Cultura, donde ha estado adscrito siempre con gobiernos de IU, PSOE y PP. En Orive, ha sido subdirector y director general y en 2011 dio el salto a la gerencia cuando se le encomendó por primera vez gestionar el IMAE con Juan Miguel Moreno Calderón como edil de Cultura, que ha manifestado su "gran pesar" ante esta pérdida.

“Desde hace treinta años hemos mantenido una gran amistad”, señala Moreno Calderón, que destaca su vocación de servicio público, sintiéndose especialmente agradecido “por su apoyo durante mi periodo como concejal y, especialmente, por su sensibilidad con el Festival de Piano Rafael Orozco, que siempre cuidó”.

Y precisamente fue en uno de los conciertos de la pasada edición cuando Moreno Calderón vio por última vez a Limia. “Fue un día muy feliz y siempre lo recordaré”, concluye el exconcejal.