Encuesta Anual de Situación que elabora Construcor

Más de la mitad de los empresarios de la construcción de Córdoba cree que 2023 será peor que 2022

Un 77% de las empresas ampliará o mantendrá su plantilla y un 23 cree que no podrá hacerlo

Construcción de un edificio de viviendas, en una imagen de archivo.

Construcción de un edificio de viviendas, en una imagen de archivo. / CÓRDOBA

Diario CÓRDOBA

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Más de la mitad de los empresarios de la construcción de Córdoba creen que 2023 será peor que 2022. En concreto, el 56% cree que 2023 será un peor año para su actividad en Córdoba, según la Encuesta Anual de Situación que elabora Construcor, debido al estado de incertidumbre sobre la evolución de la economía en general y el impacto real de los fondos de recuperación.

No obstante, según informa Construcor en un comunicado, hasta un 45 por ciento estima que mantendrá su plantilla y dos tercios de los encuestados prevé aumentar o mantener la facturación de este año, lo que refleja una situación favorable en términos de cartera de obra y proyectos contratados a ejecutar durante 2022.

El sondeo

La encuesta se ha realizado durante el mes de noviembre y han participado 50 de las 73 empresas cordobesas asociadas a Construcor

Resultados y facturación

Los empresarios participantes, 50 de las empresas más representativas en tamaño y distintos sectores de actividad de los asociados de Construcor, edificación residencial, obra civil, gestión y promoción inmobiliaria, ingeniería y consultoría de servicios financieros e inmobiliarios, consideran en su mayoría que cerrarán este ejercicio cumpliendo o superando sus previsiones de resultados, un 82 por ciento, frente a un 18 que no lo hará. 

Así, en 2022, un 41 por ciento ha aumentado su facturación, un 36 la ha cumplido y un 23 por ciento la ha reducido. Sin embargo, para el año próximo, hasta un tercio estiman que bajará su cifra de negocio. 

Otro dato relevante es que el 41 por ciento acabará registrando los beneficios previstos a primeros de año, mientras que un 27 los ha mejorado y un 32 no ha llegado a ellos. Estas cifras, por una parte, muestran cierta correspondencia con la tendencia de los ofrecidos por la Central de Balances del Banco de España en cuanto a los beneficios de las empresas españolas en relación a su tamaño, mayores en las compañías más grandes y menores en las más pequeñas. Por otra, reflejan la incidencia del alza de los precios de los materiales y los costes de la energía, que no han trasladado a sus clientes.

Empleo

En cuanto al empleo, a pesar de que un tercio no ha aumentado plantilla o la ha reducido a lo largo de este año, en 2023 hasta un 77 por ciento cree la ampliará, el 32, o la mantendrá el 45. El dato es revelador del esfuerzo de las empresas por mantener el empleo en las circunstancias actuales, y las que prevén aumentar la contratación consideran que esta previsión corre el riesgo de que no pueda cumplirse por la falta de profesionales cualificados, uno de los problemas enquistados en los subsectores de la edificación residencial y obra civil.

Inversión

Respecto a la inversión este año, un 29 por ciento ha superado sus objetivos y un 48 por ciento los ha cumplido, cifras que se equilibran sobre el año próximo, aunque se reducen ligeramente. Así, un 36 estima que la aumentará y un 36 que la mantendrá frente a un 23 que la reducirá. No obstante, el dato positivo es que suben en un 7 por ciento quienes estiman que aumentarán su inversión en 2023 sobre 2022 a pesar del escenario económico y las dificultades actuales. 

Los problemas más importantes

Finalmente, los problemas más importantes a juicio de los encuestados, y al margen de la falta de trabajadores especializados, se encuentran en los costes de los materiales, cuya imprevisibilidad se mantiene a pesar de la mejor evolución de las cadenas de suministro lo que mantiene precios altos. Después, y por este orden, en los obstáculos administrativos, especialmente en el subsector de la promoción inmobiliaria, en el aumento de costes laborales y en los costes financieros.