La junta de gobierno local continúa su tramitación y tiene previsto aprobar este mediodía en sesión extraordinaria el proyecto de ordenanzas fiscales para 2023 que contempla una rebaja en los impuestos municipales de un 0,5% y la congelación de las tasas. Lo hace, de momento, sin tener amarrado un acuerdo con Vox y con la única novedad respecto al anteproyecto aprobado en septiembre de la inclusión de una de las propuestas del Consejo del Movimiento Ciudadano de rebajar un 0,5% la tasa de reconocimiento de la situación de fuera de ordenación (AFO). El gobierno local entiende que hay que hacer un esfuerzo con la periferia.
Después de la aprobación de hoy, el teniente de alcalde de Hacienda y Urbanismo del Ayuntamiento de Córdoba, Salvador Fuentes, tiene previsto celebrar una comisión de Hacienda extraordinaria esta semana y aprobar las ordenanzas fiscales de manera definitiva el próximo 2 de noviembre en un pleno extraordinario. El edil del PP entiende que Vox apoyará esta propuesta aunque consideren que no es suficiente, si bien a estas alturas no tienen amarrado un acuerdo con la formación de Paula Badanelli, según ha explicado él mismo.
“Somos bien pensados y creo que los apoyarán. Entiendo que no es la propuesta que ellos esperaban —dijo en referencia a Vox— pero tenemos poco margen de maniobra”, defendió. Para justificar esa falta de margen, Fuentes ha hecho alusiones al escenario internacional de incertidumbre y a la guerra en un año 2023 que vaticina de “muy complicado”. Por eso, insistió, se complica el seguir bajando impuestos, ya que “todos los números aconsejan mucha prudencia”.
Además de contar con Vox —con quienes, como decimos, no se ha cerrado el acuerdo— el gobierno municipal debe sumar al menos un voto más, por lo que la decisión del concejal no adscrito, David Dorado, será crucial para sacar adelante la propuesta fiscal de PP y Cs para el año próximo.
Qué impuestos bajarán
En concreto se bajan cuatro de los seis impuestos que se cobran desde el ámbito municipal. Cae un 1% el IBI de rústica, lo que supondrá, ha asegurado en otras ocasiones el delegado de Hacienda, que Córdoba ya entre en la media ponderada de lo que se cobra en España. Este era, precisamente, uno de los objetivos marcados en el acuerdo firmado entre PP, Cs y Vox al principio del mandato.
En cuanto al impuesto sobre vehículos de tracción mecánica, también baja un 1% con el objetivo de armonizarlo al resto de España. Las motocicletas ya pagaban lo mínimo.
El tercer impuesto para el que se plantea una bajada es el de construcciones, instalaciones y obras, el ICIO, que baja dos puntos. Por último, también se prevé una bajada del impuesto sobre el valor de los terrenos de naturaleza urbana, la plusvalía, que se reduciría otro punto, en este caso, entre vivos. La plusvalía mortis causa prácticamente se eliminó con las ordenanzas del 2022. Además, se le introduce una modificación técnica que tiene que ver con las personas mayores que viven en residencias. Se establece que la primera vivienda de esas personas sea su casa original, y no la residencia en la que vivan, aunque tengan que estar censados en las mismas. Sin la modificación, los herederos perdían oportunidad de acogerse a la bonificación.
Además, en el IBI de naturaleza urbana se actualiza la previsión contenida con el objetivo de contrarrestar una posible actualización de los valores catastrales de los bienes por parte del Gobierno central.
Cuarta bajada de impuestos consecutiva
Si el gobierno de PP y Cs consigue sacar adelante este anteproyecto de ordenanzas fiscales se logrará impulsar la cuarta bajada consecutiva de impuestos del mandato. Si se suman las caídas previstas para 2023 los principales impuestos municipales sumarían caídas del 13,93% en el caso del IBI rústico, el impuesto de vehículos un 9,74%, el ICIO un 12,24% y la plusvalía un 8,27%.
Por otro lado, las tasas por licencia de actividad se han rebajado un 15% en todos sus conceptos, mientras que las tasas por entrada de vehículos de clientes a polígonos es un 50% más baja y la de obras un 6,25%. Las tasas por ocupación de la vía pública con mesas y sillas (veladores), los servicios de mercados municipales y la de mercadillos han descendido un 20% en cuatro años.
