La obra de la Cuesta del Reventón empieza a dejar ver el sendero original a las Ermitas gracias a la intervención que la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) inició a finales de junio y espera concluir en el mes de octubre. Desde finales de julio, el camino está cerrado al tránsito peatonal y ciclista por seguridad, ya que la presencia de maquinaria complicaba el paso por determinados tramos.
El deterioro de este camino rural a la Sierra --uno de los 17 que el Ayuntamiento de Córdoba se ha comprometido a arreglar en el Plan especial de la Sierra de Córdoba-- se debía a la falta de mantenimiento de los drenajes existentes y al uso intensivo de la ciudadanía, tanto peatones como ciclistas que suben a diario a las Emitas por este camino histórico. Las escorrentías de la Sierra habían erosionado intensamente el pavimento sacando a la luz piedras de gran tamaño que lo hacían impracticable para determinados peatones. Urbanismo quiere que tras el arreglo pueda ser transitado con comodidad por familias, escolares y personas en sillas de ruedas. También se pactó con los ciclistas dejar un tramo para su disfrute, ya que el arreglo de este camino despertó críticas entre este tipo de usuarios, algunos de los cuales querían que se quedase como estaba antes de la actuación.
Además, el desnivel que había entre el sendero original y el camino tal y como estaba en junio por la pérdida de materiales era casi de medio metro en algunas zonas. «El desgaste y el deterioro eran preocupantes», recuerda Salvador Fuentes, presidente de la GMU defendiendo la necesidad de actuar de urgencia sobre el sendero. «Se va a dejar el trazado original pero adecentado», añade para rechazar también las dudas que había de que el camino se fuera a convertir en una pista pavimentada.
La empresa Sercli Paisajismo y Construcción SL fue la adjudicataria de las obras, que tienen un plazo de ejecución de cuatro meses y un presupuesto de más de 164.000 euros. También se prevé solventar la evacuación de las aguas pluviales, la restauración de elementos deteriorados y dañados y el diseño de señalética adecuada. Aunque el ritmo de los trabajos iniciales ha sido más lento del previsto --las primeras labores de reparación de pasos de agua, cunetas y obras de retención de agua son más complejas--, la idea es que en octubre la Cuesta del Reventón esté lista.
