El déficit de guardias civiles en la provincia de Córdoba "es endémico desde hace muchos años", pero durante los meses de verano "el problema se agrava aún más al reducirse la plantilla en un tercio por las vacaciones estivales", unido a otras circunstancias como las bajas médicas, las comisiones de servicio en otras provincias, la composición de los "distintas unidades sin catálogo propio" –equipos ROCA, Viogen, Pegaso, Ciberdelincuencia, Equipos de Compañía–, "todo lo cual da lugar a que muchas unidades queden reducidas al mínimo, sin apenas poder realizar servicios de patrulla y ni siquiera abrir las dependencias para atender a la ciudadanía", según señala un comunicado de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC).

"Si el resto del año la situación es preocupante, en verano se hace insostenible, con guardias civiles desbordados y sin poder atender adecuadamente a los requerimientos, con el consiguiente perjuicio para los ciudadanos. Hay Puestos que se quedan con solo uno o dos efectivos, sin poder vigilar sus demarcaciones y abriendo las dependencias únicamente algunos días en horarios restringidos", apunta la AUGC.

"Las escasas patrullas de Seguridad Ciudadana que pueden salir a la calle -explica la AUGC en un comunicado- tienen que vigilar y atender las incidencias de varias poblaciones, algunas muy distantes entre sí, por lo que se incrementa mucho el tiempo de respuesta ante requerimientos urgentes. Además, si se producen altercados en grandes concentraciones de personas por las numerosas fiestas locales propias de esta época, en algunos casos deben ser atendidas por solo dos agentes, al no haber más patrullas o encontrarse muy lejos las que pueda haber en la provincia".

Desplazamientos

La AUC pone como ejemplo de lo que ocurre en toda la provincia que "una patrulla del Puesto de Almodóvar del Río debe cubrir, además de su demarcación, la de Posadas, Hornachuelos, Guadalcázar, Fuente Palmera, y además atender las incidencias que se produzcan en Villa del Río, Montoro, El Carpio, Cerro Muriano, Bujalance, Adamuz o Villafranca si no hay patrulla en esa zona. De ese modo, las patrullas pasan más tiempo desplazándose entre poblaciones y demarcaciones territoriales que realizando cometidos de vigilancia y seguridad ciudadana".

"Incluso -añade la AUGC- se tienen que unir guardias civiles de distintos Puestos para poder formar patrullas, con todo lo negativo que ello conlleva. Pero además, la falta de efectivos no afecta solo a las unidades pequeñas, sino también a las de mayor dimensión, como son los Puestos Principales, donde se ven obligados a asumir cometidos de distintas áreas funcionales simultáneamente, compatibilizando el servicio de atención al ciudadano con el de puertas. Y en lo que respecta al Seprona la situación no es mejor, porque una sola patrulla se ve obligada a atender las incidencias que se produzcan prácticamente en toda la provincia".

"Esta problemática parece preocupar poco a la dirección general de la Guardia Civil y al Ministerio del Interior pero también a las corporaciones locales de la provincia", continúa el comunicado, a pesar de que son sus conciudadanos quienes sufren el deterioro de la seguridad ciudadana en las poblaciones afectadas por este déficit de agentes.

Por último, la asociación sindical señala que la única solución posible pasa por atender lo que AUGC viene reivindicando desde hace mucho tiempo: publicación de las vacantes existentes desde hace años, incremento del catálogo provincial, creación con transparencia y dotación de catálogo propio de las unidades no reguladas, pero "sobre todo reorganización territorial y funcional de las unidades de la Guardia Civil, para poder rentabilizar adecuadamente los escasos recursos humanos que ahora están dispersos y desorganizados, en un modelo policial obsoleto que necesita actualizarse y modernizarse para ofrecer el servicio que demanda la actual sociedad cordobesa y española".