La provincia de Córdoba ha registrado desde 1975 -año en el que comienzan a contabilizarse- una treintena de olas de calor, hasta el 2021, último verano analizado por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), según los datos publicados por esta. En todo el país, los registros ascienden a 65. Es decir, en Córdoba se han producido la mitad de estos episodios con respecto a las cifras generales.
Esto no implica, claro, que las temperaturas hayan sido menores ni los veranos, menos calurosos. Para identificar una ola de calor, la Aemet toma el 5% de días con mayores temperaturas en el histórico de las diferentes estaciones de medición con relevancia y establece un umbral. Entonces, Córdoba cuenta con el umbral más alto, fijado en 41,6 grados, excepto en el norte de la provincia (le sigue Sevilla con 41,2 grados). Para que exista una denominada ola de calor, deben producirse tres días consecutivos de temperaturas anormalmente altas.
El primer episodio de calor de este tipo del que se tiene constancia en Córdoba se remonta a 1975. En total, 14 provincias lo sufrieron. La más temprana tuvo lugar entre el 24 y el 28 de junio del 2012 y se vivió, además, en otras 23 provincias. Por el contrario, la más tardía se produjo en el mes de septiembre del 1988. En concreto, entre los días 5 y 8. El año que más olas de calor se experimentaron en la provincia fue el 2017. Llegaron a producirse cuatro, tres de ellas en julio y una en agosto.
Sin tener en cuenta el presente verano, el episodio anormal de calor en Córdoba más reciente es del 2021, entre el 11 y el 16 de agosto. También llegó a otras 32 provincias. Este 2022, los termómetros han superado en varias ocasiones los 40 grados en la capital y algunos municipios, llegando a dejar un aviso rojo en la provincia el pasado 14 de julio, debido a temperaturas extremas.
