El Ayuntamiento de Córdoba prevé reabrir el Zoo el próximo 1 de septiembre, una vez que la crisis sanitaria provocada por el brote de gripe aviar se encuentra estabilizada y que no se han producido nuevas muertes ni se han confirmado contagios desde finales del pasado junio.
Fuentes de la delegación municipal de Medio Ambiente indicaron ayer que el actual decreto de cierre de las instalaciones abarca todo el mes de julio, mientras que agosto es un mes en el que, tradicionalmente, este centro cierra sus puertas al público. Por esto, si no se producen imprevistos, las visitas regresarán en septiembre en el horario habitual.
Desde el Gobierno de la Junta de Andalucía y la delegación municipal de Medio Ambiente informaron ayer, como se ha referido, de que no se han registrado nuevas muertes desde finales de junio, cuando se determinó la necesidad de sacrificar a los animales que estaban infectados y otros que estuvieron en contacto directo con el espacio donde se produjo el foco.
En total, los afectados fueron nueve ansares indios, otras tantas ánades reales y una cerceta de las Bahamas. Fuentes de la delegación municipal de Medio Ambiente indicaron que las aves continúan aisladas dentro de este centro de conservación y comentaron que «desde que se realizó el sacrificio, no ha habido ninguna novedad, ningún contagio ni ninguna muerte más». Además, confirmaron que se mantiene el protocolo de vigilancia activa y pasiva activado para el tratamiento de esta crisis sanitaria.
En esta línea, desde el Ejecutivo regional explicaron que la vigilancia activa consiste en la toma de muestras a los animales y la pasiva, en controlar las bajas causadas por la gripe aviar. De este modo, precisaron que se han tomado muestras de todas las aves que habitan en el zoológico y, en estos momentos, se está «a la espera de los resultados por parte del Laboratorio Central de Veterinaria de Algete».
En cuanto a los fallecimientos (esta crisis sanitaria ha provocado diez), se está realizando «un seguimiento conjunto tanto por parte del veterinario del Zoo como de los Servicios Veterinarios Oficiales de la Junta de Andalucía, sin que se hayan reportado nuevos casos de mortalidad desde final de junio hasta la actualidad», indicaron.
Asimismo, hicieron hincapié en la labor que se está desarrollando «de manera conjunta con el Ministerio y la Consejería para la elaboración de un plan de vacunación» que permita la inmunización de las aves del zoo, una actuación que depende de la autorización de la Unión Europea.
Esta medida se considera necesaria «debido al riesgo de transmisión de la enfermedad» que se da en este recinto «por su proximidad al río, donde abundan las anátidas silvestres», así como por el «alto valor de algunas especies de aves alojadas en el Zoo», subrayaron las mismas fuentes.
En este sentido, hay que recordar que la principal hipótesis que se baraja sobre la aparición de la gripe aviar en el Zoo cordobés es que la enfermedad podría haber sido transmitida por aves silvestres. Desde un primer momento, se ha aludido además a la necesidad de prevenir que la enfermedad pueda ser transmitida a las personas. El Zoo cerró sus puertas el pasado 3 de junio, tras confirmar los primeros fallecimientos por esta enfermedad, que se produjeron a finales de mayo.
