El pasado miércoles, en la modalidad online, dio comienzo en Córdoba el programa de formación y capacitación Gira mujeres, impulsado por Coca Cola, en el que mujeres de entre 18 y 60 años pueden presentar su idea de negocio con el objetivo de fomentar el espíritu emprendedor. Este curso las ayuda a desarrollar una iniciativa enfocada en el sector de la alimentación y bebida o que quieran reinventar un negocio ya existente dentro del mismo. El proyecto que presenten debe comprender «desde el inicio del trato de la materia prima, hasta su venta final. Las ideas de publicidad, empaquetamiento, recursos humanos o de empresas productoras, tienen cabida. No nos enfocamos únicamente en hostelería», afirma María del Carmen Muñoz, de Fundación Mujeres, coordinadora del proyecto en Córdoba.
Córdoba ha contado con veinticinco plazas de inscripción, de las que han sido completadas veinte. «La mayor parte de la participación proviene de los sectores de la alimentación y el turismo, aunque también hay participantes de empresas proveedoras y pequeños comercios», confirma Muñoz.
El curso está dividido en tres fases: formación, asesoramiento y concurso. La fase de formación está constituida de cuatro sesiones con una duración de tres horas cada una, divididas en dos semanas, en las que el equipo de Coca Cola ayuda a las participantes a adquirir conocimientos para la puesta en marcha del proyecto. La segunda fase, también con una duración de dos semanas, consistirá en un asesoramiento individual a las participantes para moldear la propuesta de valor y las estrategias competitivas de su idea. Por último, los proyectos presentados por Córdoba entrarán en concurso y aquellos seleccionados accederán a la Comunidad gira, una red de contactos de todas las participantes en España. En noviembre se comunicarán los cuatro mejores proyectos a nivel nacional, «obteniendo de premio 5.000 euros de capital semilla con el que comenzar a cimentar su negocio».
El programa no se basa solo en aportar ayuda financiera y de formación en torno a los negocios, sino que también se enseñarán consejos sobre gestión emocional en el trabajo, capacitación personal y a reforzar las competencias digitales de las participantes. Uno de los factores que intenta fomentar el proyecto es el emprendimiento en los entornos rurales, convirtiendo a sus participantes en agentes económicos y sociales en su comunidad. El fin es ayudar al desarrollo económico y a la fijación de la población rural y evitar el abandono de entornos rurales.
