La prehabilitación puede reducir en dos o tres días la estancia en las unidades de cuidados intensivos (uci). Esta práctica clínica disminuye las complicaciones en pacientes con cáncer y los costes asociados. Estas afirmaciones las ha realizado este jueves Sara Laxe, médico rehabilitadora y jefa de servicio de Rehabilitación y Medicina Física del Hospital Clínic de Barcelona, durante una mesa redonda sobre Rehabilitación Oncológica en el Congreso Nacional de Rehabilitación y Medicina Física (Sermef) y el segundo Congreso Iberoamericano de Rehabilitación que se celebra hasta el día 18 en Córdoba. Durante este congreso se ha puesto de manifiesto que la prehabilitación es una práctica clínica que introduce componentes de la rehabilitación a los pacientes antes de someterse a intervenciones médicas intensivas, como la cirugía en pacientes con cáncer, para optimizar la función y mejorar la tolerabilidad y secuelas de la intervención. Su objetivo es el de incrementar el funcionamiento de las personas a fin de evitar el declive funcional secundario a ciertas prácticas como la cirugía mayor, trasplante de médula o quimioterapia.

Esta experta, que es además la presidenta del comité científico del congreso, ha explicado que la supervivencia del cáncer "se ha incrementado enormemente en los últimos años y por ello se debe cambiar el paradigma en el cuidado de estas personas, porque ya en muchos casos se puede hablar del cáncer como una enfermedad cronificada". En este contexto, la doctora Laxe ha afirmado que "la atención al cáncer ya no debe centrarse solo en los tratamientos plenamente quirúrgicos y oncológicos, sino que hay una serie de cuidados entre los que la rehabilitación juega un papel muy importante".

"No hay que pensar ya solo en la rehabilitación después de una intervención quirúrgica o proceso oncológico. Hay que pensar en la importancia de la prehabilitación, que sería preparar al cuerpo previamente para el declive funcional posterior", ha descrito la especialista. "En el caso del Clínic, llevamos 700 pacientes entrenados con los programas de prehabilitación con alta complejidad en los que se ha demostrado una reducción de complicaciones postquirúrgicas del 50%", ha evidenciado.

"El ideólogo de la prehabilitación fue el doctor Francesco Carli, anestesiólogo de Canadá, que detectó que del conjunto de pacientes ancianos que iban a ser intervenidos de cirugía mayor, tenían mejor pronóstico aquellos que llevaban una vida activa, estaban bien nutridos y tenían un estado emocional y cognitivo mejor. Desde entonces, el concepto de la prehabilitación y la incorporación de programas para mejorar el funcionamiento de los pacientes previos a intervenciones complejas se está implementando en diferentes hospitales. Es importante la inclusión de los médicos rehabilitadores para garantizar los mejores resultados funcionales y la continuidad asistencial, dado que aun habiendo incrementado la función, muchas de estas intervenciones dejan alteraciones en el funcionamiento que posteriormente tienen que ser seguidas, evaluadas y mejoradas", ha descrito la experta de la Sermef.

Durante la mesa de rehabilitación oncológica, el doctor Peret, también del servicio de Rehabilitación del Hospital Clínic de Barcelona, y el doctor Juan Antonio Olmo Fernández-Delgado, del Hospital General Universitario Morales Meseguer de Murcia, han presentado dos proyectos sobre cómo la integración del médico rehabilitador interconsultor hospitalario promueve beneficios en los pacientes ingresados.

La doctora Laxe ha desgranado que "los médicos rehabilitadores tienen un papel importante, por ejemplo, en el cáncer de próstata (evitando la disfunción eréctil y urinaria); cáncer de mama (tratando el linfedema y complicaciones de hombro); o en programas de intervención de pérdida de fuerza; y en intervencionismo para tratar el dolor no oncológico. Alba Gómez Garrido, del servicio de Rehabilitación del Hospital Vall Hebrón, también presente en la mesa, ha considerado que es "imprescindible el tratamiento de rehabilitación del cáncer en cada una de sus fases". En este contexto, Peret ha señalado que "un paciente encamado que tiene dolor y con un bloqueo nervioso o una intervención se les puede paliar ese dolor y evitar una pérdida funcional".

Por último, Laxe ha explicado que "el médico rehabilitador como experto en funcionamiento supone un valor añadido porque puede informar a los pacientes o sus familias sobre la expectativa del nivel de funcionamiento al alta hospitalaria y ayuda, además, en la elaboración el plan de rehabilitación, potenciando el conjunto de facilitadores que los pacientes tienen a su alcance para mejorar su nivel de funcionamiento y su calidad de vida".

Acto de inauguración

El Congreso de Medicina Física y Rehabilitación se ha inagurado este jueves en Córdoba, ciudad que ya lo había acogido en dos ocasiones, en 1971 y en 2012, en este último año, con un "gran éxito" de asistencia, según han subrayado durante su apertura sus organizadores. El evento, en su edición número 60, cuenta con más de 700 participantes y con la presencia de especialistas internacionales de primer nivel. El director general de Cuidados Sociosanitarios de la Junta de Andalucía, José Repiso Torres, ha destacado durante la inauguración el problema existente en el campo de la rehabilitación, asegurando que no se le puede dar el alta a ciertos pacientes por “la imposibilidad de ofrecerles esos cuidados para que se rehabiliten y tengan una buena recuperación”.