Tras dos años en los que la pandemia causada por el coronavirus hizo que la tradicional campaña de cuestación de Cáritas, que tiene lugar con motivo del día del Corpus Christi, se tuviese que llevar a cabo de forma telemática, la iniciativa ha vuelto a las calles. La operación ha contado este jueves con 250 voluntarios distribuidos en 20 puestos, localizados en diferentes áreas de la ciudad de Córdoba.
Ismael Ramírez, responsable y coordinador del área de reciclaje de Solemcor, la empresa de inserción laboral de Cáritas Diocesana, resalta la importancia de volver a la calle con normalidad tras la pandemia para "hacernos visibles tras estos años de situación complicada" y pide a los cordobeses que “sigan siendo conscientes de las necesidades que hay que seguir cubriendo y de la labor que realiza Cáritas a todos los niveles, no solo a nivel de empleo sino también de ayuda o de acompañamiento y en todas las líneas y áreas en las que trabajamos”.
Ramírez explica que en estos momentos sigue presente una situación complicada, de crisis, en la que a mucha gente le cuesta llegar a fin de mes. "Hay cuestiones y situaciones familiares muy duras que nosotros tenemos que abordar porque para eso estamos", añade. El coordinador del área de reciclaje ha indicado que los objetivos siguen siendo los mismos tras la pandemia. Ramírez ha expuesto que, aunque muchas de las situaciones de dificultad se mantienen, "su trabajo no ha parado en ningún momento, ni en pandemia ni en post pandemia. Seguimos trabajando con la misma involucración que siempre".
Esta labor social imprescindible que lleva a cabo Cáritas es imposible sin la colaboración de los voluntarios y los ciudadanos. "Tenemos la suerte de tener una cantidad ingente de personas totalmente implicadas con esta labor y gracias a ellos podemos seguir realizando estos proyectos y ayudas", ha destacado Ismael Ramírez.
Cáritas parroquiales
Una de las personas que colaboran con Cáritas es Laura Cabello, trabajadora social y coordinadora de las Cáritas parroquiales, a las que "muchas familias cordobesas llegan diariamente planteando necesidades". Cabello ha destacado la importancia de esta campaña, pues "con lo recaudado con la cuestación podemos ayudar a todas las familias que atendemos".
Rafael Guillén, su compañero de puesto, ha asegurado que esta semana es muy importante no solo por la cuestación sino también para "la sensibilización y para salir a la calle y dar imagen de lo que es Cáritas para que la sociedad cordobesa sea consciente de que estamos aquí para apoyar a las familias que lo necesitan".
"Después de dos años lo he cogido con muchas ganas y con mucho entusiasmo", ha explicado esta trabajadora social, "y la gente está colaborando mucho como en los años previos a la pandemia". Durante estos dos años son muchos los que, como Laura, han teletrabajado, lo que ha sido "una misión casi imposible", llegando a "triplicar" el trabajo. "Esto parece que está pasando y ya estamos volviendo a la normalidad", ha concluido.
