Francisco Márquez tiene 84 años y lleva más de una década recibiendo apoyo de la Asociación Cordobesa de Parkinson (Aparcor) desde que le fue diagnosticada la enfermedad. El parkinson, patología de la que este lunes 11 de abril es el día mundial, es la segunda dolencia degenerativa más frecuente entre la población, después del alzhéimer. Carmen, hija de Francisco, señala que a su padre le viene muy bien acudir a la unidad de día de Aparcor porque comparte su situación con otros usuarios como él, al margen de recibir servicios beneficiosos como son fisioterapia, logopedia o traslado al centro.
«Mi padre era profesor de autoescuela antes de la llegada del parkinson, una persona muy activa a la que le encanta bailar. Recibir asistencia en la asociación de parkinson le hace mucho bien porque sus responsables, entre ellas la presidenta, Pepi Villena, son personas muy cercanas. Sin embargo, la sede de Aparcor se ha quedado pequeñita. Estaría bien que el Ayuntamiento u otra administración ayudara a Aparcor a encontrar otro sitio más amplio, para que puedan seguir haciendo sus actividades.», apunta Carmen, que resalta el buen trato que recibe su padre en el hospital Reina Sofía, en especial del doctor Toribio Molina. Ahora mismo en Aparcor hay 9 plazas de unidad de día concertadas y otras 2 privadas cubiertas, de las 20 existentes.
La responsable de la unidad de Neurología del Reina Sofía, María Teresa Cáceres, indica que un 0,3% de la población general padece parkinson, porcentaje que sube al 2% entre los mayores de 60 años y al 4% entre quienes tienen 80 o más años. En Córdoba, el Reina Sofía estima que podría haber unos 3.000 personas a las que se les ha diagnosticado la enfermedad. Cáceres destaca que los casos de parkinson están aumentando, debido a que existe mayor prevalencia de la patología en edades avanzadas y actualmente la población cada vez está más envejecida. Según esta neuróloga, un aspecto que se debe tener en cuenta son los factores genéticos asociados al parkinson, que suelen ser más comunes en enfermos de menos de 45 años, con antecedentes familiares de la patología.
La responsable de Neurología del Reina Sofía indica que los casos más complejos de parkinson y otros trastornos del movimiento son derivados a una consulta especializada del hospital. Por su parte, los tratamientos, llamados de segunda línea son recibidos por pacientes, en el hospital de día de Neurología, en la sexta planta del hospital General.
¿Qué tratamientos existen?
María Teresa Cáceres resalta que entre los tratamientos más novedosos frente al parkinson está el HIFU (High Intensity Focused Ultrasound), que ha demostrado ser útil para el abordaje de otras enfermedades, como el temblor esencial. Además, subraya que se está empezando a utilizar a su vez el HIFU en pacientes con parkinson tremorígeno.
Cáceres añade que el servicio de Neurología del Reina Sofía está participando en varios estudios de investigación, en colaboración con el Imibic y que, en estadios más avanzados de la enfermedad, se utilizan terapias de segunda línea, siendo una de ellas la cirugía o estimulación cerebral profunda.
