Todo parece indicar que Córdoba vivirá un mayo festivo casi con total normalidad y que lo mismo ocurrirá con la Semana Santa. Con la sexta ola del coronavirus en horas bajas y unos niveles envidiables de vacunación, la situación que se presenta para la primavera es bastante positiva. La semana pasada, el Ayuntamiento de Córdoba aprobaba las bases para la celebración de la Feria de Nuestra Señora de la Salud y ya hizo lo mismo hace días con los Patios y las Cruces de Mayo. La Junta de Andalucía, por su parte, indica en todo momento que la Semana Santa se celebrará si el coronavirus no hace otra de las suyas. Todos estos factores son el combo perfecto para que Córdoba pueda vivir una temporada alta turística que se parezca lo máximo posible a la ahora lejana época prepandemia.
Lo confirma, pero con limitaciones, el presidente de la Asociación de Empresarios del Hospedaje de Córdoba (Aehcor), Félix Serrano, quien estima que mayo «será un mes bueno», pero que alude a las reservas de última hora como la clave para conocer unos datos mucho más concretos. La experiencia de estas últimas semanas hace pensar que la ocupación llegará a porcentajes bastante positivos.
Mejoran los fines de semana
Serrano explica que estos últimos fines de semana están dejando cifras significativas en cuanto a ocupación y, por lo tanto, para la primavera «entendemos que vendrá mucha gente». Sin embargo, el presidente de Aehcor no se atreve a hacer una estimación porque «ni siquiera la puedo hacer para el puente del 28 de febrero».
La clave está, insiste el empresario, en las reservas de última hora. El turista nacional ya era dado a reservar con poca antelación, el hecho de no tener que depender de aviones permite no tener que programar un viaje con tanto tiempo. A esto se ha unido una pandemia de por medio que ha empezado a cambiar las formas de viajar.
El ejemplo más claro está en esta sexta ola que se desató con la llegada de la variante ómicron. Cuando todo el mundo pensaba que las navidades del 2021 serían casi normales, llegó un repunte de los contagios que todavía colea. Casos como este implican que los turistas tengan muchos más recelos a la hora de viajar, esperan casi a última hora para reservar y esto implica que hacer una estimación sea bastante complicado.
Los patios, la clave
Dentro del mayo festivo, la fiesta de los Patios es la joya de la corona y tiene varios ingredientes para serlo, pero dos de ellos son clave: son Patrimonio Mundial y duran más que ninguna otra fiesta, lo que permite o estancias más largas o directamente muchas más estancias.
Lo confirma Serrano, que cree que «en los días clave, tendremos buena ocupación». Pero no solo de los Patios vive el mayo festivo. La otra fiesta del mes que más reservas hoteleras suele generar es la Feria de Nuestra Señora de la Salud, también bastante extensa. El presidente de Aehcor recuerda que en la última Feria, la del 2019, «tuvimos muchas reservas y muy buenas».
Los Patios son la fiesta que más turismo atrae dentro del calendario de ocio
En cuanto a los otros eventos, la Cata del Vino Montilla-Moriles suele atraer a un público mucho más local, como mucho, provincial. En cuanto a las Cruces de Mayo, ocurre lo mismo que con la Cata, aunque tienen algo más de tirón, pero su celebración se limita a muy pocos días. En el caso de las Cruces sí ocurre algo positivo, y es que siempre coinciden con el 1 de mayo, fiesta nacional. Serrano recuerda que la fiesta puede tener tirón por sí misma, pero el hecho de que sea festivo en toda España «hace que esa fecha funcione muy bien».
Poco turista extranjero
El sector ya ha alertado en varias ocasiones de que todavía queda un tiempo considerable para que regrese el turista de fuera de España. Esta ausencia de viajeros internacionales hará mella, casi sin ninguna duda, en las cifras que se cosechen durante esta temporada alta. En los años previos a la crisis del coronavirus, el turista extranjero superaba al nacional cuando se analizaban los datos del mes de mayo. El tirón de la ciudad en esa fecha es innegable. No hay que irse muy lejos para comprobar este hecho. Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) de 2017, 2018 y 2019 confirman que durante los meses de mayo de esos ejercicios el turista internacional superó en número al español. De 2020 ni siquiera hay datos (las fronteras estaban cerradas, incluso las provinciales) y las cifras del 2021 ponen sobre la mesa esa dificultad de recuperar al viajero de fuera.
El turista de fuera era mayoritario en mayo antes de la pandemia del covid
Según el INE, en el 2019 Córdoba capital recibió en mayo a 103.530 turistas (teniendo en cuenta solo a los alojados en hoteles). De esos viajeros, 51.049 eran españoles, mientras que cerca de 52.500 eran extranjeros. El año pasado, lamentablemente, la realidad era bien distinta. En mayo del 2021 el número de turistas alojados en hoteles que visitaron Córdoba capital fue de 40.159 personas, de las cuales 33.250 eran españolas, por apenas 6.909 de fuera del país.
Acerca de la previsión de llegada de turistas extranjeros para esta primavera, Félix Serrano entiende que «alguno vendrá, pero no en grupo» e incide en que el peso del visitante internacional era muy importante antes de que la pandemia irrumpiera de lleno en todo el mundo.
Ya hay reservas
Córdoba ha llegado a tener sus hoteles completamente llenos durante los días más importantes de mayo, como son los fines de semana del Concurso de Patios. Si se llegará a ese 100% de ocupación todavía no se sabe, pero muchos establecimientos hoteleros refieren ya reservas para esos días. Este periódico ha contactado con varios hoteles de distintas categorías que apuntan a ocupaciones que, de momento, se sitúan entre un 20% y un 40%.
Los establecimientos consultados confirman que se trata de porcentajes que van a subir sí o sí. Estiman que la mayor parte de las reservas se darán en torno a un mes antes de las celebraciones. También se refieren a esa última hora de la que habla el presidente de Aehcor como la dinámica más repetida durante los últimos meses.
La reservas de Semana Santa se concentran en el Jueves y el Viernes Santo
Primero, la Semana Santa
Antes de que llegue el mayo festivo, el mes más turístico para Córdoba, tiene que venir la Semana Santa. Este año, la Semana de Pasión se celebra entre el 10 de abril (Domingo de Ramos) y el 17 de abril (Domingo de Resurrección). Que caiga en abril es una buena noticia para la ciudad porque, después de mayo, este es el mes que cosecha mejores datos turísticos de forma histórica.
Serrano explica que con la Semana Santa ocurrirá lo mismo que con el mayo festivo, que la falta de previsión supondrá esperar casi hasta última hora para ver la ocupación real. El presidente de los empresarios hoteleros cordobeses estima que para el Jueves Santo y el Viernes Santo los establecimientos tendrán buenos datos.
La ocupación para esas fechas suelen concentrarse en los días festivos y en los sábados y no en toda la semana, algo que ocurría antes del coronavirus y que seguramente se mantendrá una vez la pandemia haya terminado.
De casi un 90% de ocupación a menos de un 60%: la herida del covid
El año 2019 fue un ejercicio muy positivo para Córdoba desde el punto de vista turístico y 2020 indicaba que también iba a serlo. Lo que vino después no es necesario explicarlo. En los años previos a la pandemia del coronavirus, Córdoba capital llegó a cifras realmente buenas en cuanto a visitantes. A niveles de ocupación, en el 2017, por ejemplo, durante los fines de semana de mayo se rozó el 90% en los hoteles, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). El año pasado, la ocupación de los fines de semana en mayo sobrepasaron por poco el 57%. La ocupación general, más de lo mismo. Durante 2017, 2018 y 2019 los meses de mayo superaron con creces el 74% de reservas por plazas, mientras que en mayo del año pasado no se llegó ni al 39%. Las esperanzas, por lo tanto, están puestas en gran parte en este mes de mayo del 2022. Es el mes más importante para el sector y solo abril consigue acercarse en algo a unas cifras con las que la ciudad sueña todavía.
