La nueva uci pediátrica del hospital Reina Sofía de Córdoba tiene capacidad para atender a unos 400 pacientes al año, según ha destacado este jueves el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, durante la inauguración de estas instalaciones, que han contado con una inversión de la Junta de Andalucía de más de dos millones de euros. Los pacientes que se atienden en esta unidad, según el consejero, proceden de toda Andalucía, ya que el Reina Sofía es centro de referencia a nivel autonómico para el abordaje de numerosas patologías que afectan a la población de 0 a 16 años.

En el acto de inauguración, en el que también ha estado presente la directora gerente del complejo hospitalario, Valle García, Aguirre ha señalado que “se trata de una obra de gran relevancia, ya que el nuevo espacio permite ofrecer una atención más íntima, cómoda y, sobre todo, de mayor calidad que da respuesta a las necesidades de los menores que requieren cuidados críticos y a sus familias”.

La nueva uci se ubica en la primera planta, contigua a la zona quirúrgica infantil, lo que permite acortar los tiempos de atención y la distancia, algo fundamental para los pacientes críticos que ingresan procedentes de quirófano o que deben ser trasladados a él. Además, cuenta con mucho más espacio que en las anteriores instalaciones, llegando casi a triplicar la superficie (se ha pasado de 396 metros cuadrados a 1.067).

La nueva uci pediátrica del Reina Sofía en cifras RAMÓN AZAÑÓN

Gracias a este incremento de espacio, la nueva uci cuenta con 12 habitaciones individuales. Estas habitaciones, además, han sido diseñadas teniendo en cuenta la importancia de la luz, la amplitud y la ventilación, imprescindibles en pacientes que, en ocasiones, permanecen largos periodos ingresados. Concretamente, cada habitación mide unos 20 metros cuadrados, cuenta con ventana propia y un sillón relax para el acompañante. Además, el uso de cristal para la delimitación de las habitaciones permite mantener una visualización directa y constante del paciente y su entorno, a la vez que las puertas de acceso a cada módulo garantizan su intimidad.

Otra de las mejoras en el campo de la humanización ha sido la incorporación de un espacio propio para los familiares de pacientes ingresados, en el que los padres y madres pueden comer y desconectar, relajarse y asearse, de forma que se facilita el acompañamiento permanente y se favorece el descanso del cuidador.

Según ha destacado el consejero, “se trata de un cambio muy necesario, que nos permite mejorar la seguridad, la confortabilidad, la accesibilidad, fomentar una atención más personalizada y, en definitiva, mejorar la calidad de atención que prestamos a nuestros pacientes y sus familias. Esto es especialmente importante para aquellas patologías de las que somos referencia para la comunidad autónoma, como el trasplante infantil hepático, cardiaco y pulmonar y el abordaje de cardiopatías congénitas en el niño. Estos pacientes, que habitualmente generan estancias muy prolongadas, disponen de un entorno más seguro y amigable y pueden mantener el contacto permanente con sus padres o cuidadores”.

Mejor abordaje

El consejero ha destacado que esta uci cuente con la Unidad de Técnicas, en la que se realizan determinados procedimientos invasivos (como endoscopias digestivas, canalización de vías centrales, inserción de drenajes pleurales o punciones de médula ósea, entre otras) que hasta ahora se realizaban en la uci, con la consiguiente ocupación de cama de hospitalización. Este espacio cuenta con cuatro salas en las que el paciente (ingresado en planta o ambulatorio) acude para que se le realice la técnica oportuna.

Además de las mejoras estructurales, la nueva uci ha renovado la dotación en sistemas de soporte respiratorio y monitorización. Igualmente, se incrementa el espacio para el almacenamiento de material y equipamiento (algo fundamental para contar siempre con stock de materiales específicos cerca de la asistencia a pacientes críticos).

Homenaje

En el pasillo central de la nueva uci luce un cartel con el nombre Doctor Juan Luis Pérez Navero y una leyenda con la que el hospital quiere rendir homenaje a este profesional que ha dedicado la práctica totalidad de su vida laboral a mejorar la atención pediátrica en el hospital Reina Sofía.

El doctor Pérez Navero, que también ha estado presente en este acto, llegó al hospital hace casi 40 años y se jubiló a finales del año pasado. Estas últimas dos décadas ha liderado el servicio de Pediatría de este centro, siendo antes también responsable de la uci pediátrica. En palabras del consejero, “además de su labor asistencial, ha impulsado una atención sanitaria dirigida a la excelencia, basada en el desarrollo de las áreas pediátricas de capacitación específica y la investigación de calidad, en un entorno seguro y amigable, que ha permitido colocar a la UGC de Pediatría en el top ten de los Servicios de Pediatría de nuestro país”.