El primer fin de semana oficial de las rebajas de enero no parece haber respondido a las expectativas, a tenor del ambiente que este domingo se vivía en la zona comercial del centro de la ciudad. Era el primer domingo de rebajas, el sol acompañaba y los negocios estaban abiertos, como otros años, esperando recibir a los clientes que prefieren esperar a que pase la primera avalancha para buscar su chollo.

Sin embargo, por las calles comerciales (Concepción, Gondomar, Cruz Conde, Gran Capitán y alrededores) no se apreciaba el bullicio propio de estos días ni se veía a los viandantes con las manos llenas de bolsas de distintos establecimientos. Por otro lado, también hay que tener en cuenta que algunos de los citados clientes que se han acercado estos días hasta los negocios, lo han hecho para descambiar alguno de los regalos recibidos en el día de Reyes, con lo que la estimación puede también ser errónea.

La actividad que se percibía, al menos a simple vista, era bastante más relajada y en las tiendas no se produjeron, salvo casos contados, las largas colas en las cajas a las que estamos acostumbrados. Como excepciones, se podría citar un par casos o tres, como Zara, Álvaro Moreno o El Corte Inglés, que parece engullir por sus céntricas puertas a cuantos clientes pasan por Ronda de los Tejares.

Así, por ejemplo, al preguntar a las dependientas de una tienda que suele tener bastante afluencia, como es Tezenis (Cecilia, Paloma y Mari), nos reconocían que este domingo la cosa estaba «más flojita que de costumbre», aunque reconocen que el primer día sí se notaron algo las ganas de comprar, pero insisten en apuntar que se nota la situación «más tranquila de lo habitual».

Sin embargo, en Mango, Ana nos explica que las rebajas «están funcionando bien» y que como su negocio ya abrió el domingo pasado y ya tenía puestas las rebajas pues es natural que en el segundo domingo la actividad se note algo más tranquila. 

Aún así, sí puntualiza la responsable de esta tienda de Gran Capitán que antes de la pandemia la actividad era mucho más frenética, pero matiza, que había mucha más mercancía disponible, más stock, que daba también más posibilidades de negocio. Así que, viendo las circunstancias actuales, Ana concluye apuntando que, por ahora, las rebajas, al menos en su tienda, «están siendo bastante buenas».

El presidente de la Federación de Comercio de Comercio de Córdoba (Comercio Córdoba), Rafael Bados, define este primer fin de semana de rebajas como de «mucho ruido y pocas nueces» y hace referencia a que aunque se veía mucha gente por las calles, a los negocios muchos de los clientes «iban a hacer devoluciones de los regalos navideños, más que a las rebajas propiamente dichas». Así que, según Bados, están respondiendo «a lo que se preveía». 

Añade el presidente de los comerciantes cordobeses que actualmente las rebajas «no son ni sombra de lo que fueron», pues, según recuerda, «antes un día de rebajas en cualquier tienda suponía un aumento de la caja de un 100% y en la actualidad el incremento puede estar en torno al 20%». Este fenómeno se viene dando, explica Bados, desde que en el 2012 se liberalizaron los periodos de rebajas, ante lo que solo pueden responder las grandes cadenas que pueden poner ofertas en cualquier momento. Y a esta nueva manera de concebir las rebajas se ha unido la pandemia, que ha venido a poner mayores dificultades aún.