CSIF, primera fuerza sindical de la enseñanza pública en Córdoba y en Andalucía, considera que “en las circunstancias actuales de la pandemia del Covid-19, la Administración educativa debe garantizar un sistema para que la cobertura de bajas de profesorado se haga con la máxima celeridad posible, de forma que, en el caso de coincidir varias bajas en un mismo centro, se recurra a llamamientos telefónicos de profesionales sustitutos sin tener que esperar a una convocatoria a través del sistema de provisión de interinidades (SIPRI)”.

Así lo manifiesta en una nota de prensa la responsable del Sector de Educación de CSIF Córdoba, Elena García, ante la vuelta a las aulas de los centros educativos el lunes 10 de enero, tras las vacaciones de Navidad, con lo que se daría aplicación al punto octavo del acuerdo de 6 de septiembre suscrito para el curso 2021-2022. Con el empleo de este sistema se agilizaría, en caso necesario, el procedimiento de cobertura de bajas que es muy previsible que se produzcan debido a la alta incidencia que se está produciendo del virus en la población en general debido al elevado nivel de contagiosidad de la variante Ómicron, según argumenta la representante sindical.

Asimismo, desde CSIF Educación Córdoba se demanda a la Consejería de Educación y Deporte de la Junta un refuerzo de la plantilla docente, especialmente en Educación Infantil, que abarca alumnado de 3, 4 y 5 años, para afrontar con mayores garantías de seguridad la situación actual de la pandemia y para extremar las medidas frente al virus de la Covid-19. García apunta que “esta etapa educativa está compuesta por alumnado que aún no se ha vacunado ni se puede vacunar por el momento, ya que el suero pediátrico está indicado a partir de los 5 años”. Además, recuerda que en la población de esta franja de edad inferior a seis años no es obligatorio el uso de mascarilla, lo que hace que las posibilidades de contagio y propagación del virus se incrementen considerablemente en las aulas donde el alumnado no usa esta barrera de protección.

En este sentido, la responsable de CSIF Educación Córdoba explica que, si bien la organización sindical firmó un acuerdo con la Administración educativa sobre recursos humanos para el curso 2021-2022, “es la propia evolución de los acontecimientos, con el incremento de contagios y la subida de la incidencia, la que hacen necesarios más efectivos fundamentalmente en dicha etapa educativa, donde son necesarios más apoyos para poder afrontar con más garantías la situación”.

Asimismo, CSIF exige a la Administración educativa la adquisición de purificadores para las aulas de los centros andaluces y medidores de CO2 como medida preventiva para frenar la expansión del virus. Además, el sindicato exige la realización de test masivos tanto entre el profesorado como entre el alumnado ante la vuelta a las aulas cordobesas.

“Desde CSIF Educación defendemos la presencialidad pero siempre con seguridad, lo que conlleva, dada la situación pandémica que atravesamos, replantearse e intensificar una serie de cuestiones que entendemos que son fundamentales para unas mayores garantías para el conjunto de la comunidad educativa”, concluye García.