Los contenedores de vidrio de Sadeco contarán con unos sensores que indicarán si se han llenado por completo, si se mueven o si se están quemando. La empresa municipal de limpieza apostará por tecnología smart city (ciudad inteligente) que mejorará la eficacia en la gestión de residuos, en este caso los de vidrio, y permitirá establecer rutas más ajustadas para la recogida de los mismos (actualmente se recogen cada 10 días). La junta de gobierno local ha aprobado hoy el expediente contratación para el suministro de sensores volumétricos que se instalarán en los mil contenedores de vidrio por un importe de 248.491,74 euros (IVA incluido), que incluye la creación de una plataforma de sensorización que permitirá conocer el estado de los contenedores (con un código QR instalado en cada uno de ellos o bajándose una aplicación de la web de Sadeco podrá conocer el estado de un contenedor en concreto) el suministro e instalación de los sensores y una campaña de comunicación para dar a conocer el invento. 

La concejala de Transformación Digital, Lourdes Morales, y la presidenta de Sadeco, Isabel Albás, han explicado que esta aplicación de smart waste (basura inteligente) es un paso más dentro de la política de digitalización impulsada por el gobierno local, que ha llevado a poner sensores en los patios para conocer el aforo de visitantes o controlar el aforo de eventos multitudinarios como el celebrado por la Guardia Civil en octubre. Esta colaboración entre la Delegación de Transformación Digital y Sadeco permitirá establecer una gestión más eficiente en la recogida de residuos, optimizar la ruta de recogida, dar más información al ciudadano y detectar situaciones de vandalismo. 

Así es el nuevo sistema de basura inteligente de Sadeco. RAMÓN AZAÑÓN

Los sensores miden la capacidad de llenado del contenedor, la temperatura  y si el contenedor tiene movimiento. De este modo, si se llena o arde saltarán unas alarmas que se enviarán a través de sms, correo o llamadas a la sede de Sadeco. El programa cuenta con 4 meses para su puesta en marcha, tendrá 6 años de garantía y estará financiado con fondos Feder Edusi.