La ciudad está falta de eventos de altura y la actuación de la escuela francesa de equitación Le Cadre Noir de Saumur ha supuesto un revulsivo para que se tenga en consideración la importancia del mundo del caballo en Córdoba y provincia.

La participación de los jinetes franceses es un reconocimiento internacional a Córdoba Ecuestre al más alto nivel, por parte de la escuela de equitación más importante del mundo, en la inauguración del 25 aniversario de Córdoba Ecuestre, que ha desplazado a la ciudad su espectáculo más importante, con unos medios impensables, entre ellos cuatro veterinarios para atender a 28 caballos que participan en el espectáculo especial, 19 jinetes y amazonas y la alta representación del caballo francés, la segunda industria más importante del país vecino, con la presencia del director general del Instituto Francés del Caballo y la Equitación, Jean Roche Gaillet, que cuenta con el respaldo de los ministerios de Agricultura y de Deportes, exhibiendo los números principales de su amplio catálogo y respaldando a Córdoba Ecuestre en esta efemérides.

Con los tres espectáculos ofrecidos, que han agotado las entradas, la entidad cordobesa pretende recobrar el pulso de los eventos de gran nivel, según el gerente de Córdoba Ecuestre, Javier Gómez. Tras la representación valiente y responsable de la Feria del Caballo de Córdoba (Cabalcor) en el pasado año, cuando en España se suspendieron todos los eventos ecuestres, y la ausencia de representación del espectáculo Pasión y duende del caballo andaluz, la asociación cordobesa regresa, tras año y medio de inactividad y sin percibir ningún ingreso, a la élite mundial con este espectáculo, que cuenta con la participación de la Diputación de Córdoba.

Tres jornadas de espectáculo

El espectáculo que durante tres días ha acaparado la atención del mundo del caballo, contando con la presencia, entre otros, de un importante ganadero y varios aficionados que se han desplazado desde Madrid para asistir a la representación, ha supuesto la conjugación de dos culturas diferentes del caballo, la francesa y la española, que se han fundido en algunos números realizados por jinetes de ambas escuelas para mostrar lo mejor del mundo ecuestre, tras un conocimiento mutuo de diez años.

Tras la partida ayer de la escuadra francesa, la más importante del mundo, Córdoba Ecuestre vuelve a situarse de nuevo en el panorama internacional, aupándose en el candelero y con planes para asistir de nuevo a las arenas ecuestres más importantes del mundo, durante la celebración de su primer cuarto de siglo de existencia.