La residencia de gravemente afectados de Alcolea ha celebrado este viernes el Día de la Discapacidad con un acto de convivencia en las instalaciones del centro, dependiente de la Diputación de Córdoba. El delegado responsable de la residencia, Francisco Ángel Sánchez, ha inaugurado el acto con un agradecimiento al personal que trabaja en el centro, “que demuestra cada día, y con más intensidad desde que empezó la pandemia, su compromiso con el cuidado y protección de los usuarios y usuarias del centro y con sus familias, y que hace de este centro una institución de referencia”.
En concreto, Sánchez ha recordado cómo “el buen hacer del equipo de profesionales de la residencia y de su director, Jesús de Miguel, mantuvo a las personas usuarias, especialmente vulnerables ante el covid-19, protegidas frente a la amenaza de la pandemia en los peores momentos de la emergencia sanitaria”.
A día de hoy, “el cumplimiento escrupuloso de todas las medidas de seguridad y prevención, la profesionalidad del personal y el cariño con el que tratan a las personas usuarias contribuye al bienestar de las familias, que pueden estar tranquilas sabiendo que sus seres queridos están aquí bien cuidados”, ha añadido Sánchez.
En el acto también ha participado el fiscal de Mayores y Discapacidad, Fernando Santos Urbaneja, que ha destacado el trabajo realizado por la Diputación en materia de atención a la Discapacidad, y ha celebrado la aprobación de una ley de personas con discapacidad que “cambia radicalmente el estatuto jurídico de las personas que tienen dificultades”.
Llamada a la no discriminación y respeto a la diferencia
Por último, el director de la residencia ha dado paso al mensaje realizado por las personas usuarias del centro con motivo del Día de la Discapacidad, con una llamada a la no discriminación y al respeto a la diferencia. Al acto han acudido también la presidenta de la Comisión de Discapacidad del Colegio de Abogados, Cristina López; el presidente del Foro Andaluz de Bienestar Mental, Isidoro Cubero; y el presidente de la Fundación Cordobesa de Tutela, Juan Antonio Moñiz. Por su parte, en representación de las familias de las personas usuarias, Josefa Calero ha agradecido tanto a la Diputación como a la residencia que “nuestros hijos e hijas vivan rodeados de un ambiente agradable gracias al cariño con el que son cuidados por los profesionales del centro”.
El acto, en el que se ha hecho entrega de reconocimientos a varias personas por su implicación en el trabajo diario en la residencia, ha contado por primera vez con la participación de una intérprete de signos para facilitar la comprensión a las personas usuarias que padecen problemas de audición, y ha finalizado con una suelta de palomas en la explanada ubicada frente al centro.
