David Dorado ordenó abrir una causa general a la contratación municipal entre los años 2016 y 2020 antes de su cese como delegado de Infraestructuras, Sostenibilidad y Medio Ambiente. Se sabía que el concejal de Cs, el pasado 19 de noviembre y en calidad de alcalde accidental, ordenó abrir una información reservada sobre varios contratos de Infraestructuras (una treintena de licitaciones de Alumbrado Público que se remontaban a 2016), que habían sido recogidos en una auditoría encargada por el mismo Dorado a una entidad extramunicipal. La intención era ampliar la información que el Ayuntamiento había enviado ya a la Fiscalía y que ha dado pie, junto a la denuncia de IU y Podemos, de la causa.
La ambigüedad del decreto de 19 de noviembre llevó al secretario del Pleno, a quien iba dirigido el encargo, a pedir una aclaración sobre la materia a investigar. El edil de Cs respondió el 27 de noviembre, es decir, dos días antes de su cese, aclarando que la información reservada que pedía debía versar sobre “los procedimientos de contratación llevados a cabo en el Ayuntamiento de Córdoba durante los años 2016 a 2020, tanto contratos mayores como contratos menores, realizados tanto por cualesquiera de las áreas del propio Ayuntamiento, incluida Infraestructuras como por los organismos autónomos y de las empresas municipales”. A todas luces, la vastísima tarea que tiene por delante el instructor del expediente requeriría infinitos medios y mucho tiempo, y apuntala la tesis de la oposición de que el edil de Cs quería abrir fuego contra todo para diluir la responsabilidad que pudiera derivarse de los hechos ya señalados por la Fiscalía en los que ve indicios de delito.
Hoy, reestructuración de gobierno
En lo político, la jornada de ayer fue un compás de espera para el equipo de gobierno, que anunció que zanjará hoy la crisis abierta por el caso de Infraestructuras y la retirada de competencias al delegado. Aunque nadie se pronunció oficialmente sobre este asunto, fuentes municipales aseguraron a este medio que es muy posible que no se asigne finalmente ninguna área o delegación a David Dorado, y que como mucho sería nombrado viceportavoz de su grupo municipal (un cargo remunerado pero sin apenas responsabilidad política), además de cobrar por la asistencia a los plenos.
El alcalde, José María Bellido, eludió dirigirse ayer a los medios de comunicación, mientras que la portavoz del PSOE, Isabel Ambrosio, reiteró sus críticas hacia las medidas adoptadas y reclamó de nuevo al PP que rompa su acuerdo de gobierno con Cs. A estas críticas se sumó las de la coordinadora local de IU, Irene Ruiz, que pidió al alcalde contundencia y el cese de Dorado.
El exdelegado de Infraestructuras no se dejó ver ayer por Capitulares y se espera que en los próximos días la coordinadora cesada acuda al Ayuntamiento para hacer su declaración de bienes e intereses.
Un informe que justifica el cese de la coordinadora
El detonante que activó ayer el cese de competencias de David Dorado fue haber votado en contra del despido de la coordinadora general en la junta de gobierno local blandiendo un informe del secretario del pleno en el que se defiende la presunción de inocencia de cualquier empleado o directivo mientras se instruye una causa. El cese se aprobó, por contra, con un informe del titular del órgano de apoyo de la junta de gobierno local, competente en la materia, en el que se entiende que esta suerte de altos cargos o cargos directitos pueden ser cesados libremente por la junta de gobierno local. Además, este informe considera perfectamente motivada la causa del cese "para preservar la buena imagen del Ayuntamiento de Córdoba y la confianza de los ciudadanos en la institución".
