El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, Lorenzo del Río, ha afirmado este viernes en Córdoba que la litigiosidad "está creciendo" a raíz de la pandemia de coronavirus y "lo estamos notando cada vez más. En algunos sitios estamos superando ya lo que se había ingresado en los dos años anteriores". En el caso concreto de Córdoba, ha detallado que "vengo de las secciones civiles y penales, y ya tienen unos números de 2.000 asuntos, ya han superado todo lo ingresado el año pasado".

Lorenzo del Río ha realizado estas declaraciones unos momentos antes de participar en la clausura del vigésimo quinto Congreso Nacional de la Asociación Profesional de la Magistratura, donde ha destacado que "hay que trabajar la litigiosidad, sigue subiendo constantemente y un país no puede permitirse eso, porque entonces nunca vamos a dejar de necesitar jueces". Así, ha recordado que "en otros países del entorno europeo está mucho más limitada, mitigada con recursos como las conciliaciones y las mediaciones".

Consultado por una de las inquietudes manifestadas en el congreso, la relativa a la independencia judicial, el presidente del TSJA ha indicado que tal independencia "existe, porque es una independencia que es la más importante, en el ejercicio de la función jurisdiccional. Los ciudadanos deben entenderlo, que, afortunadamente, cuentan con jueces comprometidos, trabajadores e independientes". 

Sin embargo, ha aclarado que "distinto es que hay un órgano de gobierno del Poder Judicial que nació en la Constitución un poco para que se perciba que existe esa separación de poderes y que quizá ese aspecto de independencia orgánica es lo que sí existe una cierta vulnerabilidad en la politización". En este sentido, ha admitido que "es cierto que necesitamos estabilidad institucional y que el consejo que nace para reforzar esa independencia al final parece que es el espejo de que somos dependientes"

"Esa preocupación la tenemos todos, porque nos gustaría tener una mejor percepción ciudadana, pero independientes somos todos los jueces, porque afortunadamente el CGPD es un órgano de gobierno, pero no ejerce jurisdicción y, por tanto, es ajeno al ejercicio de la función jurisdiccional", ha explicado. Lorenzo del Río ha lamentado que "el ciudadano medio muchas veces no distingue esos dos aspectos, por eso hay preocupación por ganar en esa credibilidad externa, para lo que es muy importante que el Consejo se estabilice institucionalmente, se renueve, y que no parezca que depende un poco de los distintos partidos políticos".

Retraso en la implantación de la oficina judicial

Por otra parte, el presidente del TSJA ha indicado que "la segunda preocupación" es que "la justicia necesita ser más útil, más eficiente, más rápida, y ahí los jueces necesitan una mayor ayuda del poder, sea estatal o autonómico. Y necesitamos una reforma organizativa, tecnológica, de los medios", ha reivindicado.

Del Río ha detallado que "tenemos que ganar en eficacia y para ello el número de jueces es insuficiente, pero también es cierto que con el volumen de personas que tenemos se podría ser más eficiente". De este modo, ha abundado en que "en algunos sitios no necesitamos más jueces, necesitamos organizarnos mejor". 

Consultado por el retraso en la implantación de la oficina judicial, ha recordado que "llevamos desde el 2001 con ese tema" y ha confirmado que "lo jueces no entienden el retraso". En esta línea, ha subrayado que "el sistema organizativo que tenemos es muy deficiente, hay que trabajar en un entorno colegiado, que es lo que existe en todos los países del entorno europeo. Nuestra organización es totalmente arcaica, rígida y no rentabiliza los recursos que tenemos", ha criticado.

Del mismo modo, el presidente del TSJA ha señalado que en una conversación con la ministra de Justicia, Pilar Llop (a quien se esperaba hoy en el acto de clausura del congreso, pero que finalmente no ha acudido), "le transmití la importancia que tiene esa ayuda y esas reformas, esas leyes que se llaman de eficiencia organizativa y de eficiencia procesal también, y eso depende del poder político", ha concluido. 

María Jesús del Barco, nueva presidenta de la APM

En la tercera y última jornada del congreso ha sido proclamada la nueva presidenta de la APM, María Jesús del Barco, que es decana de los jueces madrileños y sustituye a Manuel Almenar. Del Barco ha liderado la única candidatura presentada y le acompañan en el comité ejecutivo Dimitry Berberoff en la vicepresidencia e Ignacio Picatoste; Juan José Carbonero; María Eugenia Alegret; Javier Martínez; María Luaces; María José Rivas; José Ignacio Vilaplana; Concepción Jerez y Alejandro González como vocales.

En declaraciones a este periódico, María Jesús del Barco ha destacado que "asumimos muchos retos", precisando que "estamos pendientes de la renovación del Consejo y de la necesaria modificación de la ley orgánica del Poder Judicial para que los jueces elijamos a los vocales de procedencia judicial".

Asimismo, ha comentado que "hay un montón de leyes procesales en trámite, medidas de eficiencia organizativa que supondrán la implantación de los tribunales de instancia", y ha aludido a otros proyectos "en los que es necesario que se escuche la voz de los jueces".

La nueva presidenta de la Asociación Profesional de la Magistratura también ha apuntado la necesidad de "mejorar las condiciones profesionales de los jueces y magistrados de este país", y ha reivindicado como "lo más importante" la realización de "una defensa clara de la independencia de los jueces frente a todos los ataques que de manera reiterada estamos sufriendo".

Exigen la renovación del CGPJ

El congreso, titulado Montesquieu vive, ha contado con cuatro ponencias cuyas conclusiones han sido aprobadas este viernes. Entre otros aspectos, cabe destacar que en la ponencia denominada Garantías de la independencia judicial la Asociación Profesional de la Magistratura ha acordado exigir al Congreso y al Senado "que cumplan con la obligación de renovación del Consejo General del Poder Judicial". 

Entre otras cuestiones, considera "irrenunciable" que los 12 vocales de procedencia judicial del CGPJ sean elegidos por los jueces, a través de un sistema electoral con candidatos presentados por las asociaciones judiciales y por no asociados; con la posibilidad de que cada elector vote a tantos candidatos como puestos haya por cubrir, y con listas abiertas y circunscripción nacional.