El comercio de cercanía augura una recuperación lenta y complicada tras la crisis provocada por la pandemia del coronavirus, lo que precisará de un auspicio real por parte de las administraciones. Esta es una de las principales conclusiones extraída de la mesa de debate Comercio de cercanía. El valor de lo nuestro, organizada por Diario CÓRDOBA, con la colaboración de Comercio Córdoba y el patrocinio del Ayuntamiento. Las claves para salir de esta situación no son pocas y pasan por una verdadera concienciación del consumidor (que conozca el valor añadido de comprar en el barrio) y por abrazar una digitalización entendida más allá de vender por internet.
Moderados por el jefe de Economía de Diario CÓRDOBA, Francisco Expósito, en el debate han participado el teniente alcalde delegado de Comercio, Antonio Álvarez, el presidente de Comercio Córdoba, Rafael Bados, el propietario de Miguel Peris, Miguel Peris, el gerente de la firma LUI, Javier Muñoz, el gerente de Comercial Ríos, Federico Ríos, la directora adjunta de Grupo Alsara, Sandra Vanesa García, y el presidente de Centro Córdoba, Manuel Blasco.
En un momento en el que se habla de recuperación y en el que el consumo empieza a despuntar tras año y medio de pandemia, el pequeño comercio todavía precisa de mucho oxígeno para poder salir a flote. Lo ha explicado de forma clara Rafael Bados, que ha apuntado que la crisis del covid-19 ya pilló al sector sin grandes fortalezas. "No habíamos terminado de recuperarnos [de la crisis económica de 2008] y llegó el covid". De ahí que ahora tengan una salida de la actual crisis "más complicada que la de otros sectores, por lo que necesitaremos ayuda para poder superar la situación".
Que el comercio necesita ayuda lo tiene claro la administración, al menos el Ayuntamiento. Antonio Álvarez ha reconocido la incidencia "brutal" de la pandemia sobre estos negocios, que todavía no llegan a niveles de facturación precrisis. Eso sí, el comercio es un sector amplísimo en el que hay que diferenciar en subgrupos. Aunque la mayoría salieron mal parados, hubo uno que llegó a facturar más que en periodos anteriores, el de la alimentación.
La directora adjunta del Grupo Alsara así lo ha admitido, y ha recordado que "la rápida reacción que tuvo el sector de la alimentación evitó, entre otras cosas, el desabastecimiento". García ha puntualizado que, con ello, se extrajo algo positivo: "El comercio de cercanía supo reaccionar y así mostrar su carácter esencial y ejemplar".
Esa mayor facturación que vivieron empresas de alimentación como Alsara también se replicó en otros negocios dedicados, como Comercial Ríos, a la comercialización de productos de higiene, limpieza o protección personal. Eso sí, tal y como ha explicado Federico Ríos, la otra parte del negocio, la que tiene que ver con decoración o carrocerías automovilísticas, cayó y mucho.
Nada que ver, eso sí, con el descenso en la facturación de comercios de textil, que siguen notando todavía en 2021, a pesar de la mejoría, unas ventas a la baja. Lo ha contado Miguel Peris, que ha manifestado que el principal método de venta de su negocio está ligado a los eventos (bodas, bautizos, comuniones...). Todos esos eventos desaparecieron de la noche a la mañana y tal y como ha agregado Javier Muñoz "nos pilló con la mercancía comprada, en tienda y sin poder venderla".
Y lo ha confirmado Manuel Blasco, que ha señalado además la peor parte económica de la pandemia, aquellos negocios de cercanía que han tenido que echar el cierre. "El comercio viene sufriendo desde 2007 para acá un descenso continuo", ha incidido el presidente de Centro Córdoba, que ha lamentado que 2021 se vendiera "como la panacea" y, finalmente, "ha pasado triste" y con la amenaza de una sexta ola de coronavirus a las puertas de la Navidad.
No habrá desabastecimiento
Por otro lado, sobre la posibilidad de que exista desabastecimiento de ciertos productos ante la crisis del transporte, la falta de materias primas y la subida del precio de los suministros, todos los participantes han coincidido en señalar que no será así. Antonio Álvarez ha garantizado que Mercacórdoba seguirá recepcionando los productos frescos de siempre, que además vienen, principalmente, de productores cordobeses o andaluces. Sí ha vaticinado una subida de los precios, algo que es inherente a la Navidad.
Ha coincidido en el mensaje Sandra Vanesa García, que ha concretado que podrá faltar "una marca concreta", pero habrá siempre alternativas. En el sector textil, ha añadido Miguel Peris, el comercio de cercanía suele tener proveedores de la propia provincia, lo que evita dicho desabastecimiento, frenado además por el hecho de que se suele comprar el material con un año de antelación. Mientras, Federico Ríos ha puntualizado que en Comercial Ríos trabajan con materias primas que hay que comprar al extranjero dado el proceso de "desindustrialización de España" y ya se está percibiendo, y eso sí es innegable, una subida de los precios.
'El valor de lo nuestro'
Y para sortear todas esas dificultades una de las claves está en mostrar al consumidor las bondades de comprar en el comercio de cercanía. Es lo que pretende la campaña El valor de lo nuestro, que pretende que los consumidores detecten los beneficios de adquirir cualquier producto en las tiendas que hay en sus barrios. Como se ha comentado durante la mesa de debate, se trata de extrapolar algo que ya ocurre con productos de alimentación (cada vez se mira más el etiquetado de la fruta o la verdura para ver su origen, por ejemplo).
Se trata, ha dicho Bados, de que "la gente sepa que consumir en negocios de cercanía reporta unos beneficios importantes a la ciudad". Esos beneficios van desde la creación de empleo en Córdoba (el comercio es un pilar muy importante en este sentido), hasta la tributación de dichas empresas en España (al contrario que grandes cadenas), pasando por un importante factor de sostenibilidad (en la alimentación, por ejemplo, prima el producto de kilómetro cero), por un trato individualizado y cercano y por una dinamización de los barrios.
