Las asociaciones vecinales Centro Histórico, La Medina y Plataforma por Córdoba han registrado un escrito dirigido al presidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo solicitándole la recuperación del farol cordobés para la plaza de la Corredera, según informa el propio colectivo vecinal.
Estas asociaciones aprovecha para realizar su solicitud la reciente retirada de las lámparas colgantes de la plaza llevada a cabo por la unidad de mantenimiento de alumbrado público de la Delegación de Infraestructuras del Ayuntamiento de Córdoba. La medida se tomó tras el descuelgue de varias de las lámparas, incidentes que llegaron a causar daños leves a algunos viandantes, según explicó en su momento el delegado de Infraestructuras, David Dorado.
En concreto, proponen dos formas de recuperar el farol cordobés, a elegir: reintegrarlo pendiendo de cada arco de la plaza, para aprovechar la instalación actual, o recuperarlo encima de las columnas, en el espacio entre arco y arco, que es como han estado los faroles en esta plaza desde que hubo faroles de gas.
Y en el caso de que no se ejecutase la propuesta que realiza la asociación, "antes que la vuelta de las impactantes farolas de estos últimos años -señalan en su comunicado- y las desaforadas que quedan clavadas en el suelo, preferiríamos un proyecto de iluminación artística con proyectores integrados e invisibilizados en su máxima expresión, pero que no vuelvan esas farolas que, entendemos, perjudican la visión histórico-patrimonial de la plaza mayor de Córdoba".
Diseño identitario creado exclusivamente para el casco histórico de Córdoba
En su comunicado, recuerdan que el farol cordobés cuenta con un diseño identitario creado exclusivamente para el casco histórico de Córdoba, por lo que su instalación "supondría el encuentro armónico con la visión patrimonial integradora que los cordobeses tenemos asentada en nuestra memoria y que es lo que también espera, el forastero, al entrar en una plaza vetusta y emblemática, como es La Corredera".
"El farol no sólo ilumina de noche, sino que se integra en la visión diurna en comunión con el paisaje tradicional -señalan las asociaciones en un comunicado-, a diferencia de lo ocurrido en estos últimos años. Se está pidiendo, lo mismo que ocurre en la mayoría de plazas histórico-porticadas españolas, donde no se han atrevido a cercenar su paisajismo de conjunto, introduciendo elementos extraños y rompedores con la estética tradicional".
Las asociaciones vecinales añaden que la declaración como BIC de la plaza de la Corredera es anterior a la última reforma y que "las farolas que han estado instaladas ni son BIC, ni cuentan con figura de protección patrimonial alguna, por lo que pueden ser sustituidas de acuerdo a un proyecto de rehabilitación patrimonial paisajístico que siga los cauces administrativos oportunos".
Recuerdan estas asociaciones que los gobiernos local y autonómico deben velar por la conservación del patrimonio histórico, cultural y artístico, "desde una concepción integradora y global donde se incluye la defensa del paisajismo patrimonial urbano del Casco Histórico de Córdoba, como una realidad digna de protección según vienen recomendando la Unesco, la Carta del Restauro de Roma de 1932, la Carta de Venecia de 1964 o, más recientemente y entre otros, el Memorandum de Viena de 2005, que hace referencia a la expresividad y relevancia de los procesos de desarrollo propios de un lugar, integrado por los detalles de construcción como son las luminarias y los pavimentos".
