La empresa municipal de aguas de Córdoba Emacsa ha puesto en marcha un plan para intentar reducir el consumo de agua por parte de los distintos estamentos públicos y de los ciudadanos. Con este objetivo, ha solicitado a la empresa de saneamientos Sadeco que realice el baldeo de las calles con agua no potable para contribuir al ahorro de agua, coincidiendo con el estado de sequía excepcional declarado el martes por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir en el 80% de la cuenca. El gerente de Emacsa, Rafael Serrano, informó de que el embalse de Guadalmellato, principal fuente de abastecimiento de la ciudad de Córdoba, cuenta actualmente con un volumen de agua embalsada de 72 hectómetros cúbicos, lo que representa en torno al 50% de su capacidad, por lo que «procede a aplicar medidas de concienciación en el uso responsable de agua, como se viene haciendo durante todo el año».

La falta de lluvias ha agravado la sequía, por lo que Emacsa ha decidido contribuir en la medida de lo posible a rebajar el consumo de agua potable. Según el gerente de la empresa, Córdoba capital tiene garantizado el abastecimiento humano para los próximos tres años, ya que el consumo medio anual está por debajo de los 25 hectómetros cúbicos. En los últimos años, aseguró, el consumo se ha ido reduciendo considerablemente y si en el 2014, los cordobeses de la capital consumían unos 24 hectómetros cúbicos, en el 2020 esa cifra se ha reducido a 22 millones, siendo el consumo medio diario por persona de unos 135 litros, muy cerca del consumo humano diario por persona recomendado por Naciones Unidas, que debe estar entre 50 y 100 litros al día.

"Pequeños gestos de la ciudadanía"

Serrano envió un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía, por un lado, al asegurar que el consumo está garantizado, y por otro, llamó a la responsabilidad, reclamando «gestos pequeños» que contribuyan a reducir el gasto de agua. En este sentido, pidió a los ciudadanos que en sus casas aporten su granito de arena cortando el agua durante el lavado de dientes, usando las lavadoras y lavavajillas con carga máxima y usando la ducha en lugar del baño, cerrando siempre el grifo durante el enjabonado.  

Además de la recomendación a Sadeco de que baldee allí donde sea posible con agua no potable, Emacsa ha comunicado también al área de Parques y Jardines la necesidad de tener «más que nunca, un uso responsable en el riego», para lo cual han solicitado que empleen las canalizaciones de agua no potable en todas las zonas donde sea posible hacerlo. Emacsa, por su parte, tiene previsto proceder a todas las fuentes de agua de la ciudad, por si hubiera pérdidas en alguna y con el fin de reducir la presión de las mismas para que el consumo sea el mínimo posible. «Ahora mismo, cada gota de agua cuenta», subrayó el gerente de Sadeco. 

Las últimas precipitaciones no han logrado mejorar sustancialmente la carestía de agua, lo que ha llevado en los últimos días a declarar el estado excepcional de sequía y al alcalde de Córdoba, José María Bellido, a pedir a la ciudadanía que extreme la responsabilidad en el consumo de este bien tan necesario.