Si se habla de historia y tradiciones de Córdoba hay que nombrar, indudablemente, la festividad del Arcángel San Rafael, un día tan cordobés que se celebra con fecha única, diferente al resto del mundo. Esto se debe a que la onomástica de los tres arcángeles, San Gabriel, San Miguel y San Rafael, se agrupó a finales del siglo pasado en un mismo día, el 29 de septiembre. Pero Córdoba se resistió y siguió celebrando su día como marcaba el calendario tradicional, el 24 de octubre y con peroles en el campo en buena compañía.

Para conocer la historia de esta fiesta hay que remontarse al año 1278, según data la hermandad de San Rafael. Come recoge su web, ese año, cuando en Córdoba azotaba la peste, el Arcángel se apareció al padre Simón de Sousa, indicándole su deseo de que el entonces obispo de la ciudad pusiera una imagen de San Rafael encima de la torre, «obligando a celebrar fiesta en su honor y prestar veneración por la ciudad, y que con esto cesaría el contagio». Este hecho, según el relato, haría que la epidemia cesara en Córdoba. A partir de este momento la sociedad cordobesa se convierte en devota de San Rafael, pero no es hasta el año 1578 cuando se proclama Custodio de Córdoba. Según cuentan sus fieles, después de varias apariciones al padre Andrés de las Roelas, concretamente, en una que dijo: «Yo te juro por Jesucristo Crucificado que soy Rafael, Ángel, a quien Dios tiene puesto por guardián de esta ciudad». 

Desde ese día y hasta hoy se ha convertido en una tradición para Córdoba, una ciudad que ha creado toda una cultura alrededor de esta figura. Rafael es el nombre cordobés por excelencia. En la actualidad, un total de 21.562 hombres se llaman así en Córdoba, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), y 5.212 mujeres llevan el nombre de Rafaela. 

Símbolo de Córdoba

Son muchas las personalidades de Córdoba que han llevado este nombre. Personalidades como el músico y pintor Rafael Botí, que aprendió de otro cordobés ilustre, Julio Romero de Torres; el escritor y periodista Rafael García Lovera, que cuenta con una calle en el centro de la ciudad; el músico que da nombre al Conservatorio Superior de Música de Córdoba, Rafael Orozco; el exalcalde de la ciudad, Rafael Merino; o los toreros Rafael Guerra (Guerrita), Rafael Molina (Lagartillo) y Rafael González (Machaquito).

Además, recorriendo las calles de Córdoba se pueden encontrar multitud de monumentos homenajeando al Custodio, como la emblemática figura del Puente Romano, que data de 1651, que se construyó en agradecimiento por el fin de la peste en la ciudad. En la catedral también hay una figura del Arcángel tallada en plata. Como estas, son muchas las muestras de devoción que se pueden ver. Pero no solo se muestra esta devoción a través de figuras. Importantes artistas como Julio Romero de Torres han representado su imagen. Y en lo que se refiere a arquitectura, uno de los puentes que atraviesa Córdoba lleva este nombre e, incluso, el estadio de fútbol principal y un centro comercial se llaman «Arcángel», haciendo alusión a él.

Centro de interpretación

Sin olvidar la iglesia de San Rafael en la que hay un rincón que muchos no conocen, el centro de interpretación El Juramento de San Rafael, dedicado a la historia del Arcángel. 

El folleto, Descubre el ángel de Córdoba, que se puede encontrar en las instalaciones, invita a conocer todos los rincones que hacen alusión al Custodio. A esta ruta se puede acceder a través de un código QR que te lleva a cada lugar a través de Google Maps. Hasta el centro acuden cada día unas 40 personas, según una voluntaria de la iglesia, cifra que se multiplica los fines de semana, en fechas señaladas para Córdoba y en los días previos a San Rafael, que se celebra hoy.