Los sindicatos CCOO y UGT reivindican, con motivo del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, iniciativas que contribuyan a mejorar las condiciones de vida de las personas en riesgo de exclusión social y de los trabajadores. En este sentido, ambas organizaciones coinciden en denunciar diferentes circunstancias como la existencia de la figura del trabajador pobre y reclaman subidas salariales, pero también medidas que contribuyan a mejorar el presente y el futuro de las personas con dificultades. 

En esta línea, Said Faz, responsable de Política Social y Migraciones de CCOO, afirma que «nos preocupan las personas que no tienen ningún ingreso y aquellas que tienen un contrato a tiempo parcial con el Salario Mínimo Interprofesional y no pueden vivir. Hay gente trabajando en dos o tres sitios para llegar a un salario medio digno. Hay que subir los salarios conforme al IPC como mínimo, los trabajadores no pueden seguir perdiendo poder adquisitivo todos los años», denuncia.

Entre otras cuestiones, lamenta que «se ven personas que tienen trabajo y no llegan a final de mes», y admite que «teníamos mucha esperanza en la ayuda pública, la Renta Mínima de Inserción Social y el Ingreso Mínimo Vital, pero estos recursos no dan una respuesta adecuada. Hay muchas personas que no tiene derecho a las ayudas públicas, ¿por qué tardan tanto y hay tanta burocracia?», se pregunta. También recuerda que «estas ayudas deben ir acompañadas de una verdadera política de inserción sociolaboral y no se está haciendo». 

Por su parte, Francisca Haro, secretaria de Igualdad, Políticas Sociales y Empleo de UGT, coincide en que «estas ayudas de protección social no son suficientes, hay que afrontar urgentemente acciones para proteger los derechos de las personas a una vivienda digna, a la educación, a la sanidad y a un nivel de vida adecuado».

Entre otras necesidades, esta responsable afirma que «debe producirse un verdadero desarrollo de la atención a personas dependientes», demanda que «los Gobiernos asuman un verdadero compromiso con la justicia fiscal» y «garantizar unas pensiones dignas para nuestros mayores, que en muchas ocasiones mantienen a familias enteras».

Haro califica de «desgarradores» los datos que apuntan que cinco de los 15 barrios más pobres de España (Azahara-Palmeras, polígono del Guadalquivir, Sector Sur, Moreras-Huerta de la Reina y El Higuerón-Majaneque-Alameda del Obispo) están en Córdoba y destaca que «defendemos la necesidad de acometer proyectos que mejoren las condiciones de vida de estos vecinos, pero también su formación y empleabilidad».