La salida de Reino Unido de la Unión Europea comienza a provocar efectos visibles en el comercio exterior, que en el caso de Córdoba se traducen en un descenso del 53% en las exportaciones que las empresas de la provincia realizan a ese país. En este sentido, la estadística pone de manifiesto que, pese a ser uno de los principales destinos de los productos de la provincia, el negocio se ha reducido un 53% anual entre los meses de enero y julio.

En concreto, las operaciones realizadas en ese periodo han generado 27 millones de euros frente a los 58 millones alcanzados el año pasado. La información de la entidad pública ICEX España Exportación e Inversiones revela, además, que en el ejercicio 2020 se obtuvieron los mejores resultados de los últimos años (se ofrecen datos desde el 2011), ya que las exportaciones cordobesas a Reino Unido llegaron a 101 millones de euros después de incrementarse un 33% anual.

Hay que tener en cuenta que, si bien el acuerdo de retirada de este país de la UE entró en vigor el 1 de febrero del año pasado, el periodo de transición finalizó el 31 de diciembre. Desde entonces, también se han reducido de forma muy significativa las compras realizadas por empresas cordobesas a entidades de ese territorio. La estadística indica que las importaciones materializadas hasta julio son un 82% más bajas que el año pasado y apenas han llegado a 7 millones de euros. De nuevo en este caso, el 2020 cerró con el mejor dato de los últimos años al registrar importaciones por casi 100 millones de euros, un 36% más en tasa anual.

El sector que realiza más ventas a Reino Unido es el de productos de fundición de cobre, que ha registrado 5 millones de euros tras aumentar un 42% hasta julio. A este le siguen los envases y embalajes de madera, textil, cerámica y corchos, cuyas exportaciones han sumado 3 millones de euros al experimentar un crecimiento del 88% anual. El tercer puesto es para el aceite de oliva, donde el negocio se ha aproximado a los 3 millones de euros al bajar un 25%. Cabe destacar que, pese al descenso global de las exportaciones, algunos productos han experimentado fuertes subidas y este es el caso del equipamiento para la hostelería y la restauración, que ha reportado 640.000 euros tras aumentar un 456%. Entre las caídas más destacadas se encuentra la de los cítricos y frescos, con un 81% menos de ventas y 151.000 euros.

Por otro lado, en las importaciones sobresalen en primer lugar los productos semielaborados de cobre y sus aleaciones, que se han adquirido a Reino Unido por cerca de 2 millones de euros, un 87% menos que en el mismo periodo del año pasado. El valor de las compras de materias primas y semimanufacturas de plástico ha bajado un 30% hasta situarse en 1 millón de euros y la importación de electrodomésticos ha subido un 68% y ha alcanzado los 905.120 euros.

Estados Unidos

Otro país que ha experimentado cambios que afectan al comercio exterior es EEUU, aunque en este caso se trata de una evolución positiva para el tejido productivo cordobés. De este modo, con la llegada del nuevo presidente, Joe Biden, se ha suspendido el aumento de los aranceles (hasta el 25%) impuesto durante el gobierno de Donald Trump a productos de diferentes países europeos a raíz del conflicto surgido por las ayudas ilegales concedidas al fabricante de aviones Airbus. Este aumento de los gravámenes entró en vigor en octubre del 2019 y no provocó un descenso de las exportaciones, que siguieron creciendo en Córdoba dado que los aranceles afectaban al envasado, pero se siguió exportando aceite de oliva, que es el producto más vendido por la provincia a ese país.

La información de ICEX señala que en los siete primeros meses del año las exportaciones cordobesas a EEUU han sumado 118 millones de euros, un 7% más que en el mismo periodo del 2020. En ese ejercicio, las operaciones generaron 179 millones de euros, un 16% más pese a la subida arancelaria y el mejor resultado, al menos, desde el 2011. De otra parte, en lo que va de año las importaciones han vuelto a crecer después de cuatro ejercicios de descensos. Córdoba ha comprado productos a Estados Unidos por valor de 18 millones de euros, lo que ha supuesto un aumento interanual del 3%.

Entre los sectores más relevantes para el comercio con ese destino se encuentran, como se ha referido, el aceite de oliva, cuyas ventas han generado 89 millones de euros a pesar de sufrir una leve caída hasta julio. En las importaciones sobresale la compra de almendra y avellana, a la que se han destinado 5 millones de euros, un 5% menos interanual. Cabe reseñar, además, que si la adquisición de productos semielaborados de cobre a Reino Unido ha bajado, la compra de este producto a EEUU ha crecido un 674% anual hasta los casi 4 millones de euros.

Antonio Díaz: «Hemos pasado del día a la noche»

Antonio Díaz, presidente de la Confederación de Empresarios de Córdoba y de la Cámara de Comercio, afirma que a raíz de la salida del Reino Unido de la Unión Europea «hemos pasado del día a la noche», ya que antes existía libre circulación de mercancías, personas y servicios, «pero vuelve a haber aduana, aranceles, burocracia...». 

El presidente de la patronal destaca que esta situación «está afectando a muchas empresas» y cita, a modo de ejemplo de los productos que se han visto perjudicados, el vino y el brandy de Montilla-Moriles, el aceite y la aceituna. «Hay empresas que, ante las trabas que están teniendo para exportar a Reino Unido, han decidido buscar otros mercados», destaca. 

En referencia a uno de los problemas aparecidos en los últimos días en los medios de comunicación, el presidente de la patronal abunda en que «el propio Reino Unido no tiene camioneros para las gasolineras y esto lo ha provocado el Brexit. Es un aceite fino que todo lo cala», asegura. De este modo, comenta que «está mucho más difícil y más caro vender» y opina que esto es «un problema para el país, un problema de estrategia internacional de mercancías». 

En otro orden de cosas, acerca de la suspensión de los aranceles de Estados Unidos, Díaz subraya que este país es «un mercado inmenso, con millones de consumidores deseosos de comprar y de probar nuevos productos», por lo que entiende que «la política de limitación de aranceles impulsada por Biden propiciará que las exportaciones sigan creciendo». Así, en alusión a las diferencias generadas por la aplicación de los gravámenes solo a algunos países, comenta que con su inaplicación «se podrá competir». En su opinión, «la UE tendrá que saber negociar para conseguir que las relaciones comerciales sean prósperas para ambas partes».