Hace falta imaginación para identificar un patio cordobés en el desfile que esta tarde ha presentado el diseñador Palomo Spain en Madrid, inspirado en la esencia de la fiesta patria y titulado con el nombre de la tierra que lo ha visto nacer, Córdoba. El madrileño Paseo del Prado se ha convertido para el momento en una pasarela al aire libre para recibir la explosión de color y extravagancia que define al gran Spain, estandarte de la modernidad que mana del pueblo llano.

A más de uno le costará evocar Córdoba, envuelta en ese halo de tradición a ratos ajada y rancia, en la ebullición colorista de este maleno. Pero no es tan difícil si uno se coloca las gafas para mirar sin prejuicios y se fija en los detalles. Ahí encontrará que los sombreros en forma de bombines que han poblado las cabezas de los modelos recordaban los geranios o claveles que brotan de las macetas que adornan los patios cuando llega mayo. Esos trajes blancos de arriba a abajo quizás les transporten a las paredes encaladas de los recintos más visitados de la ciudad califal.

Palomo Spain lanza un soplo de aire fresco en el Madrid postpandemia con 'Córdoba' EFE

Bastará mirar para ver cómo los flecos, las hombreras, los mantoncillos o los pantalones ajustados de tonos chillones recuerdan un pasado torero y flamenco que está en cada esquina de Córdoba, mientras el traje metálico con hombro al aire les recuerde al cubo metálico que almacena el agua con la que se da de beber a las flores. El crisol de culturas que antaño fluyó en Córdoba ha vuelto a fluir en el Paseo del Prado en las camisas vaporosas y en los trajes multicolor. Ni el guiño al Córdoba CF ha faltado en los atuendos blanquiverdes.

Después de año y medio de pandemia, de respirar para adentro detrás de una mascarilla, Palomo Spain ha sido capaz esta tarde en Madrid de lanzar un soplo de aire fresco, libre de contaminación en plena calle, haciendo olvidar a los presentes por un momento que el maldito bicho sigue florando por ahí. En el desfile, sin rastro de cubrebocas, ni entre el público ni entre los modelos, Palomo Spain se ha permitido una vez más romper los esquemas para mostrarnos a una flamenca punky de pelo en pecho y una chaqueta con aires toreros combinada con pantalón de campana a todo color. Porque eso también es Córdoba, oiga.

Palomo Spain lanza un soplo de aire fresco en el Madrid postpandemia con 'Córdoba' EFE

La quietud que presiden los patios ha sido sustituida en esta ocasión por la música en directo de la banda sinfónica municipal de Madrid, que ha interpretado la pieza creada para la ocasión por Valter Sivilotti, interpretada por la pianista cordobesa María Dolores Gaitán. El público cordobés, menos acostumbrado a estas lides, también ha sido sustituido (al final, no pudo hacerse en Córdoba) por el de la capital del Reino, que ha gozado tanto como cabía esperar con una propuesta colorista y moderna. Por cierto que al desfile no le ha faltado presencia ni del mundo de la cultura como Paco León y Raquel Sánchez Silva, del corazón, como Rocío Carrasco, ni de autoridades varias, incluido el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida; la concejala de Cultura de Madrid, Andrea Levy.

Nervioso, emocionado y modesto, el diseñador ha salido detrás de su troupe de modelos para recibir el aplauso del público. Ya está hecho. Córdoba (así se llama la colección) ya está en el mundo. Esta es su 13ª colección. Quién sabe si el 13 será su número de la suerte. Si es que necesita más suerte aún.