Córdoba podrá acoger en lo que queda de año una decena de procesiones, como mínimo, tras elaborarse un protocolo entre Ayuntamiento, Junta y cofradías en el que se exponen las normas básicas para llevarlas a cabo. En el Ayuntamiento ya se han recibido peticiones para cultos externos de las cofradías, con la posibilidad de que dichas solicitudes se amplíen poco a poco. Todo ello, claro está, de seguirse el calendario tradicional, de cumplirse los actos extraordinarios de algunas corporaciones y, claro está, de que la pandemia lo permita.

Según ha informado a este periódico la delegada de Promoción de la Ciudad en el Ayuntamiento, Marian Aguilar, ya han pedido permiso para salir el redil de la Divina Pastora de Capuchinos (saldría el 18 de septiembre) y la hermandad del Socorro, que tradicionalmente procesiona el último domingo de septiembre (el día 26). Se une también como petición formal la de la hermandad del Descendimiento para sacar a la Virgen del Rayo el día 18 de este mes.

La hermandad de la Paz, que retoma esta semana los actos con motivo de la Coronación Pontificia de su titular, María Santísima de la Paz y Esperanza ha programado una eucaristía en Capuchinos para el 11 de septiembre, que estará presidida por la imagen, que saldría a la plaza en parihuelas.

Aguilar concretó que también se tiene conocimiento de actos programados por la hermandad de la Merced y de la pro-hermandad de la O. Esta última celebra el 25 aniversario de la bendición de la Virgen de la O y entre sus actos se encuentra el traslado en procesión extraordinaria de la imagen desde la Mezquita-Catedral hasta la parroquia de Nuestra Señora de la Aurora.

El mes del Rosario, que se celebra en octubre, también trae consigo normalmente numerosos actos, como pueden ser la salida de la Nuestra Señora del Rosario (hermandad de la Conversión), la Divina Pastora de la Vera-Cruz o, ya más adelante, Nuestra Señora de Amparo, de la hermandad del Huerto.