Mañana, 1 de septiembre, las cerca de 200 escuelas infantiles de la provincia abren sus puertas a los más pequeños, los niños de 0 a 3 años, en un nuevo curso en pandemia que empieza, no obstante, con mejores perspectivas, ya que todo el personal de estos centros está vacunado y los protocolos covid interiorizados y preparados. A falta de los últimos datos de matrícula confirmados por la Delegación de Educación, que ayer no pudo proporcionar, la Coordinadora de Escuelas Infantiles de Andalucía (CEI-A), la patronal más antigua del sector, informó ayer de que en la provincia de Córdoba, las matriculaciones en la etapa de 0 a 3 años han crecido en apenas 45 solicitudes en relación a septiembre del 2020. En total, según esta patronal, con datos de la Consejería aportados en julio, este inicio de curso se ocuparán unas 7.430 plazas de las 11.705 ofertadas, frente a las 7.387 con las que comenzó el anterior. «Esto significa que más de 4.270 plazas quedarán vacantes, es decir, hay actualmente una desocupación en las escuelas infantiles de la provincia de Córdoba del 36,5%», asegura CEI-A.

El que comienza es el tercer curso marcado por el covid-19 pero la experiencia del pasado año ha demostrado que las escuelas infantiles son un lugar «muy seguro» para los pequeños, ya que apenas se registraron incidencias en los centros de primer ciclo de educación infantil, aseguró ayer a este periódico José Luis Victorio, presidente de esta patronal CEI-A. Por ello, y siguiendo con las directrices del año pasado, las escuelas infantiles mantendrán el estricto protocolo higiénico-sanitario para hacer de las aulas un lugar lo más seguro posible para los pequeños y sus familias. Victorio señaló que, a pesar de las medidas de seguridad establecidas y el «normal» funcionamiento de los centros el curso pasado, que apenas presentaron incidencias, la demanda de estos centros aún está muy por debajo de lo esperado.

En su opinión, la baja ocupación en las guarderías se debe a la baja natalidad, en gran parte, pero también a la incertidumbre frente al covid, porque el tema económico está subsanado con las subvenciones de la Junta. «Cualquier familia que no tenga ingresos económicos puede matricular a sus hijos en una escuela infantil», aseguró Victorio. Los precios no han subido y un año más, las familias dispondrán de bonificaciones que van desde el 13% del importe de la plaza escolar (para todas las familias, independientemente de sus ingresos) hasta la gratuidad total, dependiendo del nivel de renta. Aunque el coste del precio por plaza para la administración es de 320 euros, las familias que tengan que abonar el tramo más alto del servicio educativo pagarán 209,71 euros mensuales (278,88 euros con comedor).

No obstante, el presidente de CEI-A lamenta que la Consejería no haya adaptado las rentas a la realidad actual y a los que se matricularon en abril se les tuvo en cuenta la renta del 2019.

Para los que aún no se han decidido a dar el paso, Victorio recordó que la convocatoria de solicitud de bonificaciones estará abierta todo el año, así como la escolarización en los centros.